El Mallorca ofrece tres temporadas a Capa
El equipo balear insiste en su fichaje y sube la oferta. El Athletic quiere asegurarse un derecho de tanteo. Marcelino no cuenta con el lateral, que acaba contrato el 30 de junio.
Aunque todo apunta a que Ander Capa se queda en el Athletic al menos hasta el 30 de junio, pese al interés de otros equipos como Alavés, Elche y Torino, que han preguntado por su situación contractual, el Mallorca, club que ha puesto un gran interés en su captación ya que sólo cuenta con un lateral derecho específico (Maffeo) le ofrece tres temporadas y le ha subido la oferta económica inicial, según ha podido saber AS.
Sin embargo, no se ha producido, al menos hasta la fecha, un acuerdo entre Capa, su agente y el club de Ibaigane para rescindir su contrato, que expira en junio. El Athletic exige un derecho de tanteo para testar su rendimiento cuando acabase este curso en el destino elegido, para aspirar de manera prioritaria a una repesca. Si no se desatasca el entuerto con una respuesta en breve, el Mallorca se empieza a impacientar y explorará otros laterales derechos. El tiempo se agota el día 31.
| Clasificación | PTS | PG | PE | PP |
|---|
| Próximos partidos |
|---|
Marcelino García Toral no cuenta con él, no le gusta en una posición muy poblada en el equipo rojiblanco con De Marcos, Lekue y Petxarroman por delante de Capa en sus preferencias. El ex del Eibar ni siquiera ha calentado en la banda en ninguno de los partidos de Liga o de Copa para asombro del entorno, que intuye en Capa el potencial que siempre ha corroborado desde su fichaje desde Ipurua tras formarse entre Lezama y Mallona. No ha sumado este curso ni un solo minuto. En cualquier caso, no existe ninguna directriz institucional para que no juegue, todo lo contrario. Es una decisión de Marcelino.
Capa quiere renovar y así se lo ha trasladado al club, pero no hubo acuerdo en un primer momento para ampliar su contrato antes de la pandemia, y en la última reunión se le ofreció sólo una campaña más, hasta 2023, lo que no convence a un Capa, que tiene 29 años y recorrido por delante. La encrucijada, por tanto, de Capa es evidente.