Milan y Juve no saben hacerse daño

Milan y Juventus no supieron darle emoción al partido más esperado de la jornada 23 del Calcio. No fue, sin duda, uno de sus encuentros más entretenidos, pero ambos pueden contentarse con una actuación sólida de sus zagas. Para los conjuntos, eso sí, queda el reproche de no haberse acercado a sus objetivos en la clasificación: los rossoneri ahora marchan terceros, a cuatro puntos del Inter (que aumentó su ventaja y ha jugado un partido menos), mientras que los turineses son quintos, a un punto del Atalanta, que debe recuperar un encuentro.

En la primera mitad hubo intensidad y alguna buena jugada, pero su acontecimiento más importante fue una baja. Zlatan Ibrahimovic, que salió de inicio, tuvo que abandonar el campo tras apenas 28 minutos por un problema en el tendón de Aquiles que se analizará en las próximas horas.

El descafeinado guion del partido no cambió en una reanudación en la que la Juve se quedó con el balón sin tener muchas ideas, y el Milan se notó solo con alguna llegada de Theo. Los contrincantes dejaron pasar los minutos sin aumentar intensidad y, al final, ambos parecieron contentarse con un 0-0 que no los deja ni contentos, ni descontentos. Noventa minutos grises como lo fue el Meazza, que debido a las restricciones solo pudo abrirle sus puertas a 5.000 personas. La idea es que sea la última jornada de la Serie A con estos tristes escenarios. Toca esperarlo.