Champions o drama
El Atlético necesita acabar entre los cuatro primeros si quiere mantener su actual estatus y una plantilla de primer nivel. Estar en Champions es obligatorio. La primera final es ante el Valencia.
Champions o drama. Esas tres palabras pueden resumir lo que será la segunda parte de la temporada en el Atlético, un equipo en horas bajas. El vigente campeón liguero se juega la viabilidad de su actual proyecto a quedar entre los cuatro primeros en el torneo liguero. Perder ante el Athletic en la Supercopa duele. Caer frente a la Real Sociedad, también. Pero no altera los planes de futuro del Atlético. Quedar fuera de los puestos de Champions, sí.
Cerezo y Gil Marín ya se lo han transmitido a la plantilla. Hay que quedar sí o sí entre los cuatro primeros. No hay otra. Y no lo tiene sencillo el equipo madrileño, puesto que Real Madrid y Sevilla tienen dos plazas seguras. Y el Barcelona pisa fuerte, se ha reforzado y en el cuerpo técnico del Atlético saben que irá a más. Betis y Real Sociedad amenazan ese cuarto puesto, por lo que el conjunto de Simeone no podrá relajarse ni un minuto.
Los jugadores saben de boca de los dirigentes que si el Atlético no está entre los cuatro primeros habrá que recortar el presupuesto. Eso significa varias cosas. En primer lugar, el equipo tendría que desprenderse de alguno de sus jugadores más importantes. El Atlético realizó un esfuerzo importante para confeccionar una plantilla de garantías: fichó a De Paul, Cunha e incorporó a Griezmann con la idea de ganar títulos. No jugar Liga de Campeones no sólo supondría vender a alguna estrella sino también dejar de incorporar jugadores de primer nivel.
Los jugadores, por otro lado, también podrían ver sus salarios recortados. Si el club pierde, a ellos también les tocaría perder. El actual estatus del Atlético se ha conseguido estando todos los años en Champions, en la principal competición continental de clubes. Ni Cerezo ni Gil Marín ni nadie del Consejo de Administración pide títulos. Pero sí acabar entre los cuatro primeros. Es el único gran objetivo de la entidad y del equipo.
La confianza en Simeone es, de momento, total. Nadie conoce mejor que él el equipo y ya ha sacado al Atlético a flote en momentos complicados. Y éste lo es. Pero ahora no es momento de poner notas ni tomar decisiones. Al final de temporada será cuando toque hablar. Y ver si el Cholo sigue con fuerzas para continuar al frente del equipo. Renovó con el Atlético con la intención de tener un ciclo ganador. Un mal año lo puede tener cualquiera.
Pero el caos sería no acabar entre los cuatro primeros. La primera final será ante el Valencia. Y desde el club y desde el entrenador pedirán el apoyo de la grada. La afición debe apoyar en este momento complicado. Muchos estaban esperando la caída de Simeone. Muchos quieren quitarse de encima al Cholo, por lo que desde la entidad saben que ahora hace falta más unión que nunca. La hinchada, que tantas veces ha llevado en volandas al equipo, debe hacerlo una vez más. Ante el Valencia no se puede fallar.