"En Arabia Saudí la mujer sigue siendo inferior al hombre"

Esteban Beltrán (Madrid, 1962) es el director de Amnistía Internacional en España y su organización viene denunciando las violaciones de los derechos humanos en Arabia Saudí. Lo hicieron en 2020 en la primera edición de la Supercopa de España en Yeda y ahora han mandado brazaletes violetas a los cuatro clubes participantes para que se solidaricen con la situación de las mujeres en el reino saudí.

¿Ha cambiado algo en estos dos años desde la primera Supercopa en suelo saudí?

Defender los derechos de la mujer, ser feminista, activista político, homosexual, opositor, sindicalista independiente... para ellos no ha cambiado. Si lo eres en Arabia Saudí muy probablemente vivirás la represión o irás a la cárcel.

Uno de los argumentos para traer este torneo a Arabia Saudí fue que impulsaría el papel de la mujer. ¿Tienen datos de que haya sucedido?

Hemos notado que la presión internacional sí tiene efectos. Y hay aspectos como que puedan entrar a los estadios de fútbol que han cambiado, pero el hecho fundamental es que, allí, las mujeres siguen siendo consideradas inferiores al hombre. Necesitan permiso de un guardián hombre para casarse, por ejemplo. El sistema está basado en la obediencia de la mujer al hombre. Desobedecerles pueden suponer para estas mujeres incluso cargos penales... Percibimos síntomas de que se puede mejorar en materia de derechos de las mujeres siempre que la comunidad internacional mantenga la tensión. Por eso es tan importante lo que la Federación y los clubes de fútbol hagan.

Ha habido algún futbolista, como Raúl García, que ha mostrado su preocupación en público. ¿Ha recibido Amnistía Internacional algún tipo de 'feedback' por parte de los clubes a esa acción de los brazaletes violetas?

Ninguna. Los equipos van a jugar un torneo local español a un territorio extranjero a cambio de muchísimo dinero. ¿Cómo se interpretaría por parte de las autoridades de Arabia Saudí que los equipos no digan absolutamente nada sobre los derechos de la mujer? Pues como que la presión internacional está disminuyendo, sólo importa el dinero y por tanto puedo cancelar cualquier tímida reforma que se hubiera hecho. De ahí la importancia de que haya gestos que le digan a las autoridades saudíes que la comunidad internacional está vigilante y que no se  puede blanquear con una competición deportiva su historial contra los derechos humanos.

Interpreta por tanto que la presencia cada vez mayor del dinero saudí en el deporte obedece  a una estrategia de blanqueamiento...

Ellos tienen esa idea equivocada, la de que invertir en clubes como el Newcastle, esta Supercopa, organizar el Dakar... hará olvidar que, por ejemplo, es un país en el que sigue  vigente la pena de muerte, por decapitación. Necesitamos que la comunidad internacional no lo olvide.