Vinicius, tres años en seis meses
Con el del Clásico de Riad suma 15 goles este curso, lo mismo que produjo en toda su estancia anterior en el Madrid. Nuevo ídolo en Oriente, proyecta números de galáctico.
Empieza a ponérsele cara a Vinicius, sí, de infalible. Sólo necesitó una ocasión para hacer un gol y añade más capas a su repertorio de regates y velocidad punta. De este Clásico saudí el brasileño emerge definitivamente como rostro reconocible. Se veía venir cuando algunos aficionados accedieron al King Fahd Stadium incluso con pancartas alusivas al 20 blanco (‘Vinicius, mi sueño es tener tu camiseta’, decía una) y Vini les correspondió. Benzema, además de nueve y capitán, musulmán, tiene tirón en Oriente Medio, pero Vinicius empieza a adquirir estatus de nuevo galáctico. Su evolución así lo indica. Con el del Clásico son 15 goles este curso, los mismos que en los tres años anteriores en el Madrid en total...
Si en el derbi se reinventó con una nueva faceta de inteligente asistente, siguió explorando esa sensación de saber jugar sin tener que finalizar. Lo hizo en el 2-3 de Valverde. El Vini que se cegaba ante la portería rival ahora tiene ojos en la nuca. Hubo a quien le extrañó que el Madrid hiciera algo de lobby para ver si Vinicius entraba entre los 30 mejores del Balón de Oro 2021 como paso previo a dar el gran salto en este 2022. Como si el brasileño fuera a revertir esa evolución aplastante del último trimestre del año pasado. Eso no va a suceder.
Vinicius podrá continuar su ascenso o frenarse, pero se ha ganado respeto. Ni bromas en Twitter, ni risas condescendientes entre otros profesionales del ramo futbolístico. Vinicius es una potencia cuyos límites nadie puede pronosticar y el primer galáctico no va a ser Mbappé ni el fichaje, si se culmina, de Haaland. Es Vinicius José Paixao de Oliveira Junior. Lo tenía claro Florentino, al que le entró por el ojo desde el primer día, cuando dijo al PSG y al mundo eso de que “Vinicius no se toca”.
Esta misma semana el Centro Internacional de Estudios del Deporte (CIES) calibraba en un estudio qué jugadores tenían ahora mismo más valor de cara a un traspaso y en lo más alto, en la cima, está Vinicius. Su valor teórico, 166,4 millones de euros, no parece tan lejano del valor práctico de un jugador de 15 goles y nueve asistencias con 26 partidos. En esta proyección de rendimiento, al promedio de 0,53 tantos por encuentro como va, si la temporada terminase con los 21 partidos que tiene asegurados el Madrid en este momento, Vini la acabaría con 24 dianas. Un escalón destinado a estrellas de este deporte. Hace justo dos años en Yeda apenas se pudo ver a Vinicius en 17 minutos durante toda la Supercopa y se fue de ella de puntillas. Aquel era un Vini terrenal, el de ahora se encamina hacia la estratosfera.