Paulo Vitor, en la encrucijada
Su condición de extracomunitario le cierra la puerta del primer equipo pese a sus números con el Real Valladolid Promesas.
Siete goles en 16 partidos disputados convirtieron a Paulo Vitor en el máximo artillero del Real Valladolid Promesas y en uno de los máximos goleadores del Grupo I de la Primera RFEF en la primera mitad de campeonato. Sin embargo, a pesar de sus cifras, el atacante brasileño, que ostenta plaza de extracomunitario, ha visto cómo por este motivo tiene cerrada la puerta del primer equipo aun cuando Pacheta le mencionó días atrás.
En la previa del partido frente al Leganés, el entrenador burgalés mostró su sensibilidad para con el rendimiento de la cantera y citó a un futbolista del que no puede echar mano, como fuentes del club reconocían posteriormente a este periódico, ni tan siquiera en Copa del Rey. No en vano, si bien la norma no está clara y la RFEF considera dicha competición no profesional, en tanto en cuanto participan conjuntos que no lo son, los precedentes juegan en contra de Paulo Vitor.
En 2018, cuando el Barcelona fichó a Coutinho, a las puertas de la disputa de la Supercopa, fuentes de la Federación explicaban a este periódico que "no hay límite de extracomunitarios", por lo que consideraban que el límite de extranjeros solo era "aplicable en las competiciones tuteladas por LaLiga". La resolución llegó, sin embargo, a través del pasaporte portugués obtenido por Coutinho al ser su mujer de ese origen, acabando con las dudas.
Aunque de facto la Federación abriera una puerta, de iure la situación es otra, y es que no hay una norma de dicho ente que exprese la diferencia con respecto a Primera y Segunda. Es más: existe un precedente de alineación indebida de la 2001-02, cuando el Valencia de Benítez fue eliminado por el Comité de Competición por utilizar a cuatro jugadores extranjeros, lo que, como ha hecho el club, cerraría las puertas al debut de Paulo Vitor.
En estas, el Real Valladolid y el entorno del jugador han tratado de agilizar los trámites de nacionalización, según ha podido saber AS, aunque, entretanto, el brasileño espera en la encrucijada, inquieto e impaciente en el Promesas, con la frustración propia de quien cree que podría ser útil y dar un salto que hasta ahora no se ha dado tampoco en entrenamientos, donde ha visto cómo están por delante (por razones obvias) jugadores como Dalisson o Narro.