El Leganés sondea el mercado sub-23 ante la escasez de fichas
La incorporación de jugadores menores de 23 años le permitiría evitar el cupo de fichas profesionales de LaLiga. Ahora sólo tiene una ficha libre. Este tipo de fichajes también tienen aristas.
El Leganés permanece pendiente del mercado de jugadores sub-23 ante la necesidad de incorporar nuevas caras que apuntalen el equipo, pero la imposibilidad de hacerlo en un número elevado debido a la ausencia de plazas vacantes. Actualmente, el Lega sólo dispone de un hueco en su plantilla (correspondiente al dorsal 25) para incorporar fichajes de pleno derecho del primer equipo. Sólo una posible baja a Fede Vico (lesionado de larga duración) daría alternativa a una segunda vacante.
En todo caso, el Leganés podría jugar con el reglamento y añadir a su elenco de futbolistas nombres de menos de 23 años que, inscritos con algún equipo filial (podrían ser incluso juvenil, en caso de tener la edad correspondiente), no gastasen las 25 fichas profesionales que concede LaLiga. Así es como, por ejemplo, se encuentra inscrito este curso Borja Garcés (22 años). La temporada pasada Miguel de la Fuente, Diego Conde o Javi Hernández también ejercieron como futbolistas con ficha filial, aunque de pleno derecho entre los mayores.
Riesgos de los sub-23
Una opción atractiva que, sin embargo, tiene sus riesgos desde el punto de vista reglamentario toda vez que (salvo circunstancias excepcionales comunicadas con antelación, como brotes COVID), todo club debe jugar con un mínimo de siete jugadores de primer equipo en su equipo. Si esta proporción se excede por alguna expulsión, lesión o similar, se puede castigar al equipo infractor con la pérdida del partido. Aquí da igual que los afectados en cuestión ejerzan como jugadores de la primera plantilla. Lo importante son sus fichas.
Actualmente el Leganés usa con regularidad no sólo a Garcés, sino a dos chicos que, salidos de las inferiores, están en dinámica del primer equipo. A saber: Naim y Cissé. Si a ellos se les unen más opciones, se corre el riesgo de cometer la antes citada alineación indebida.
Ya le sucedió al Leganés de Pellegrino cuando, en 2018, ante el Alavés, usó a cuatro jugadores con ficha filial a la vez: Lunin, Tarín, Óscar y En Nesyri. Todos de inicio. Una expulsión de un integrante distinto del once pudo haber costado al Leganés los tres puntos de ese duelo que, esa noche, se quedaron en Butarque (1-0, primera vez que el Lega salió del descenso).
“No sabíamos esa circunstancia. No éramos conscientes de ello”, admitió entonces Pellegrino. Para evitar problemas, el club dio un paso al frente y le hizo entonces ficha profesional a Tarín, que pasó de jugar con el 28, a hacerlo con el 15.