Recio reabre el debate de las prontas renovaciones en el Leganés
Recio termina contrato y desde el 1 de enero es libre para negociar con otros clubes. Es pieza clave. El Leganés no suele abordar renovaciones tan pronto.
La irrupción meteórica de José Recio en los planes de Mehdi Nafti supone un cambio sustancial en el panorama del malagueño, reconvertido ahora a pieza clave donde antes era carne de descarte. De hecho, el verano pasado el club le abrió las puertas de salida, pero fue su empeño por convencer a todos en Butarque el que lo mantuvo en el Leganés. Ahora, con el año nuevo a la vuelta de la esquina y su contrato a punto de finalizar (concluye en 2022), su rol rozando de capitán sin brazalete asignado reabre el debate de su renovación por los pepineros.
Porque Recio (30 años, el 11 de enero cumplirá 31) ha mutado en algo más que el ancla sobre el que pivota la medular de Nafti. Es también líder de vestuario y hombre veterano que gobierna los partidos más allá de la posesión. Su estilo pícaro y su fórmula para tensionar a rivales e incluso árbitros (casi siempre al borde de la amarilla, pero sin verla) hace que sus ausencias pesen no sólo por lo futbolístico, sino por el resto… que también forma parte del fútbol.
Recio y la revisión de 2021
José Recio firmó por el Leganés en 2018. Llegó del Málaga y cerró un contrato de cuatro temporadas por cerca de dos millones de euros. Entonces los pepineros eran de Primera y el Málaga acababa de perder la categoría. En 2021, revisó su contrato a la baja para poderse ir cedido al Eibar, donde jugó el curso pasado con, eso sí, limitaciones por algunos problemas físicos recurrentes.
Este curso, de vuelta a Leganés, dejó claro que su intención era quedarse pese a que la Segunda pudiera parecer un paso atrás en su carrera. “Quiero sentirme importante en un proyecto, aunque sea en Segunda”, comentó a AS en una entrevista apenas comenzada la pretemporada. Para Garitano apenas contó (fue el único no lesionado que no jugó de titular bajo el mando del técnico de Bergara), pero con Nafti se ha convertido en capitán general de la medular donde incluso ha lucido brazalete en ausencia de los tres capitanes ‘titulares’, esto es, Bustinza, Tarín o Eraso.
La política del Leganés
En el Leganés, tal y como contó Txema Indias, director deportivo, a As, los procesos de renovación se han tomado con calma para este final de 2021 y sólo la ampliación de contrato de Naim gozó de prioridad alta. Ahora, con el año nuevo, el club podría replantearse este escenario, aunque la política tradicional del Leganés invita a ser cautelosos en este ámbito. Salvo excepciones puntuales (Tarín), el club casi siempre amplía el contrato de los jugadores que finalizan esa misma temporada ya al final de la primavera.