Una columna formada en el último mercado

Rubén Reyes llegó el pasado verano al Oviedo tras la tragedia del anterior director deportivo, Francesc Arnau, con la necesidad de demostrar que estaba a la altura de un reto importante. Completó muchas operaciones, reformó media plantilla y la puso en manos de Ziganda para que explotara su rendimiento.

Y muchas de las mejores noticias en lo que va de competición vienen de jugadores fichados en el pasado verano. La columna vertebral, por ejemplo. David Costas y Dani Calvo son la clave defensiva de Oviedo que atrás ha dado un paso firme. Los dos llegaban de Primera División y el director deportivo estuvo hábil para cerrar sus llegadas en propiedad.

La de Brugman fue la última incorporación y con el paso de las jornadas se ha convertido en una de las sorpresas más agradables del Oviedo. Está cedido por el Parma y tiene opción de seguir en caso de ascenso.

Arriba, la irrupción de Borja Bastón le ha dado muchos frutos al Oviedo. Es el hombre gol que el equipo echaba en falta en los últimos años y la clave de que muchos partidos se hayan desatascado ante un juego algo previsible por momentos.