San Mamés se rinde a Benzema
Al ser sustituido en el 90’ por Jovic, la Catedral ovacionó al delantero francés. Karim anotó un doblete y llegó a los 400 goles en su carrera profesional.
El Real Madrid podía asestar un nuevo golpe a la Liga y Karim Benzema lo sabía. Una vez más se volvió a convertir en el baluarte del equipo blanco. A los siete minutos de encuentro ya había anotado un doblete que puso el partido de cara para los madridistas, incluso pudo hacer un hattrick si el pase de Hazard hubiera llegado a buen puerto. Tras noventa minutos de juego salió sustituido, y la Catedral se levantó para ovacionar al delantero francés.
Y es que el año de Karim es para enmarcarlo en una de las paredes del Bernabéu. Tras las salidas de jugadores que marcaron una época en el madridismo, el galo ha hecho olvidarlo convirtiéndose en el jefe del vestuario, exhibición tras exhibición. El primer gol de la noche fue de videojuego con un golpeo que solo muy pocos jugadores están capacitados en el mundo del fútbol, por no decir casi ninguno. Ese gol le hizo llegar a los 400 en su carrera profesional.
El segundo fue de delantero depredador. Aquello que muchos pedían, también lo tiene, y es que Benzema se ha convertido en estos últimos años en uno de los delanteros más completos del momento. Por ello, que la Catedral dejó la rivalidad atrás, y mayor parte de la grada cayó rendida ante una nueva exhibición del '9' del Madrid. El propio Real Madrid presumía del delantero francés con un gracioso gráfico sobre Benzema.
Allí donde madridistas como Di Stéfano, Juanito, Gordillo o Zidane, recibieron una especial ovación de uno de los estadios más históricos del fútbol español, fue donde Karim Benzema entró a formar parte del selecto grupo de jugadores blancos que salieron homenajeados de San Mamés. Una de las mejores maneras de cerrar un año tan especial para el delantero francés del Real Madrid.