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CELTA-ESPANYOL

Suspensos (sin aprobados) de un Espanyol a la deriva a domicilio

El equipo blanquiazul completó el peor encuentro de la temporada en Vigo, un desaguisado de actitud y táctico que desembocó en un 3-1.

Iago Aspas y RdT.
Octavio Passos

Diego López: Se desesperó en la portería, viendo como el Espanyol no podía hacer otra cosa que achicar agua ante el torrente de juego del Celta, que llegó con facilidad al área. Pese a ello, los dos primeros remates a portería fueron gol. Imposible de detener el de Iago Aspas y muy difícil el de Sant Mina, a bocajarro a los dos minutos. El meta no influyó en el resultado ni pudo reaccionar en el 3-0.

Miguelón: Regresaba a la titularidad en La Liga diez meses después y estuvo en la misma línea que el equipo. El futbolista no pudo dar profundidad y sufrió por las internadas de Galán. Tampoco pudo cerrar el juego interior de los vigueses, que hicieron daño sin la oposición perica.

Sergi Gómez: El central, que había marcado el gol de la victoria ante el Palencia Cristo Atlético el martes, no empezó con buen pie en Balaidos. A los dos minutos, no salió a buscar a Santi Mina, lo hizo tarde, y se comió la pared de Iago Aspas. Mejoró después, más agresivo, pero ese error marcó el encuentro.

Cabrera: El uruguayo completó un encuentro discreto, sin ayudas de los mediocentros, superado por Aspas y Mina en los duelos individuales. El Espanyol se agazapó demasiado atrás y el central no fue capaz de dar ese paso adelante para evitar el juego entre líneas. Tampoco logró ser determinante en las acciones ofensivas a balón parado.

Pedrosa: Sin profundidad ni juego el Espanyol, solamente las internadas de Pedrosa crearon peligro. Le ganó constantemente el duelo a Hugo Mallo, llegó a línea de fondo y centró pero sin precisión. Probó un tiro a puerta. Preso de la precipitación en algunos momentos, tomó malas decisiones que costaron contraataques.

Herrera: Con poco ritmo, aunque recuperó algunos balones, se le encontró incómodo, acabó sustituido y poco pudo aportar al juego del Espanyol. Impreciso en los pases, poco agresivo y sin estar compenetrado con Darder.

Darder: El mediocentro realizó un remato a portería que prácticamente fue a saque de banda. Un resumen perfecto del encuentro del mallorquín, que no fue el Darder de la temporada. No interpretó el mediocampo junto a Herrera, ni encontró ayudas ni fue determinante.

Aleix Vidal: No dio pie con bola. Regresó a la posición de extremo pero de nuevo la banda derecha fue una autpista en defensa y todas las decisiones que tomó Aleix fueron erróneas, incluso las técnicas. Regresó al lateral y acabó sustituido por el canterano Rubén Sánchez.

Melendo: No fue un partido para él. Muy marcado, sin espacios, sin oportunidades de buscar la profundidad de los extremos y sin un Espanyol conectado que le diera balones. Acabó sustituido.

Javi Puado.
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Javi Puado.LALO R. VILLAR

Puado: Tuvo en su bota derecha la oportunidad, aunque fuera injusta por los escasos méritos del Espanyol, de cambiar el guion del encuentro. Pero el pase de Aleix Vidal lo remato el barcelonés con la derecha, cruzado, pero se lo sacó Dituro. En la segunda mitad no logró participar ni crear ocasiones.

RdT: El delantero, anárquico, ofreció su peor cara. Desasistido, no trabajó defensivamente ni tampoco conectó balones entre líneas ni remató a portería en el segundo tiempo, cuando el equipo lo requería. En la primera mitad, sus tres o cuatro acciones cambiando la orientación del juego dieron muchas posibilidades a los blanquiazules.

Morlanes: Intentó darle tranquilidad y calma al juego, pero se desesperó ante la mala ubicación en el campo de sus compañeros y no fue capaz de cambiar los ataques del Espanyol. También se encontró superado en defensa.

Loren: Pasó desapercibido hasta el minuto 91 cuando anotó uno de los mejores goles de la temporada. Un golpeo desde la altura de los banquillos que sorprendió a Dituro.

Melamed: Lo probó con varios uno contra uno en los que logró superar al rival pero finalmente la jugada no desembocó en ocasiones.

Rubén Sánchez: Tuvo 20 minutos para demostrar su potencia en la conducción y su capacidad física, aunque tampoco fue un termómetro por la situación del 3-0 del encuentro.

Dídac: Apenas jugó unos minutos para dar el relevo a un Pedrosa cansado.