Jovic, ante su destino
El serbio tiene otra oportunidad de oro contra el Inter, rival ante el que convenció al Madrid de ficharle en 2019. El Bernabéu le mira con lupa después de su rendimiento estos años.
Luka Jovic (23 años) saltó el sábado al césped del Reale Arena de Donosti con una pesada mochila sobre su espalda: llevaba 664 días sin marcar un gol con la camiseta del Real Madrid. Para encontrar su anterior tanto hay que remontarse al 20 de febrero de 2020, en una goleada ante Osasuna en El Sadar (1-4). Era su segunda diana de blanco, después de la conseguida el 30 de octubre de 2019, frente al Leganés en el Bernabéu (5-0). Ambos goles los hizo en el descuento, cerrando marcadores muy abultados, en partidos completamente decididos en los que los rivales habían bajado los brazos. Es decir, irrelevantes en cuestión de puntos.
A nivel de aportación real, al serbio le atenazaba la losa de no haber sido decisivo en ninguna de las oportunidades que había tenido desde que fichó por el Real Madrid en el verano de 2019. Ni con Zidane (el entrenador que pidió su fichaje) ni con Ancelotti el delantero se había ganado un sitio como sustituto de Benzema. De hecho, su situación esta temporada era aún más preocupante, porque Carletto llegó a contar con Mariano por delante de él ante el Elche, cuando dio descanso a Benzema. Hasta esta última jornada sólo había jugado 106 minutos.
Por eso, su gran partido contra la Real Sociedad (un gol y una asistencia) debe ser un punto de inflexión para dejar definitivamente atrás todos los problemas que le han acompañado hasta el momento en España, una mezcla de bajo rendimiento y polémicas extradeportivas. En 74 minutos frente a los donostiarras consiguió los mismos goles y asistencias que en sus anteriores 22 partidos con el Madrid (462’). Una estadística que habla tan bien de su actuación del sábado como mal de su rendimiento anterior.
Vestuario
Courtois expresó el sentir del vestuario con un jugador que no lo ha pasado bien: “Ha marcado un futbolista que no ha jugado mucho y eso demuestra que todo el mundo está comprometido”. El belga, una de las voces autorizadas de la caseta, mandaba un mensaje público: necesitan a Jovic. Lo mismo piensa Ancelotti, consciente de que con 33 años es necesario dosificar a Benzema. Con el delantero francés a falta de más pruebas para determinar el alcance exacto de su lesión muscular, el técnico tiene decidido darle la titularidad a Jovic mañana contra el Inter en el Bernabéu (21:00 horas). Es una oportunidad de oro para alargar su momento dulce y, sobre todo, la ocasión de reconciliarse con una afición que le tiene desde hace tiempo bajo sospecha.
Otro buen partido de Luka sería un alivio para Ancelotti, porque si Benzema llega al derbi del domingo contra el Atlético será entre algodones. Aunque su protagonismo ha sido escaso, no es la primera vez que a Jovic le toca aparecer en momentos decisivos. Ya lo hizo en 2020, en la Supercopa de España que ganó el Madrid con Zidane en el banquillo. Entonces, una lesión de Karim le dio la titularidad y, aunque no marcó ningún gol, el Madrid levantó el título con él de titular tras superar a Valencia y Atlético. En aquella ocasión, Zizou le rodeó de centrocampistas (Casemiro, Modric, Kroos, Valverde e Isco) y el equipo funcionó muy bien, especialmente contra el Valencia (1-3).
Mercado
Después del partido ante el Elche, en el que el titular fue Mariano, Jovic se planteó buscar una salida en este mercado de invierno, algo que no es nuevo para él porque ya lo hizo el curso pasado (jugó cedido en el Eintracht la segunda mitad de la temporada). De hecho, en Italia se habla de un interés del Milan para contar con sus servicios desde enero. Sin embargo, su actuación en San Sebastián ha cambiado mucho el escenario. El jugador confirmó las buenas sensaciones que tiene desde hace semanas en los entrenamientos y ahora quiere agotar sus oportunidades de triunfar en el Real Madrid.
Mientras, en el club miran con optimismo la situación del delantero serbio, al que en más de un momento se consideró un caso muy difícil de reconducir. En el verano de 2019 hicieron una fuerte inversión por él (60 millones de euros al Eintracht). Entonces alcanzó su valor de mercado más alto (60 millones según la web especializada Transfermarkt), un precio que se ha desplomado en las últimas campañas y que actualmente es de 20 millones de euros. Una cifra muy alejada de la inversión que hizo el club blanco. Ahora, con sólo 23 años y un calendario cargado de partidos, en las oficinas de Valdebebas confían en que el serbio se reencuentre con la versión que ofreció en Bundesliga para que su valor en el mercado se acerque poco a poco al que tenía en 2019...
Brilló en 2019 ante el Inter
El 11 de marzo de 2019 el Real Madrid daba un cambio de rumbo clave en el futuro de Luka Jovic: Zidane era presentado como nuevo entrenador tras una temporada en la que ni Lopetegui primero ni Solari, después, consiguieron el rendimiento esperado. Cuatro días antes de esa presentación, el Eintracht empataba en Frankfurt con el Inter de Milán (0-0) en la ida de los octavos de la Europa League. Para entonces, en las oficinas blancas seguían a un Jovic que brillaba en la Bundesliga y que también era del gusto de Zidane. El técnico francés fue presentado un lunes y el jueves de esa misma semana (14 de marzo de 2019), el Eintracht daba la sorpresa en Europa al vencer en San Siro (0-1) y dejar fuera de combate al Inter. Jovic aprovechó una mala cesión de De Vrij, se adelantó a Handanovic y le superó con una sutil vaselina. Esa noche completó un gran partido ante los italianos que terminó de seducir a un Zizou que pidió un recambio de garantías para Benzema.
Aquella Europa League fue decisiva para que el Madrid tomara la decisión de apostar por el serbio, porque consiguió tres goles más: uno ante el Benfica en cuartos y dos contra el Chelsea en semifinales (uno en la ida y otro en la vuelta). Ahí acabó la participación del Eintracht en un torneo que levantó el Chelsea... de Hazard.