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INGLATERRA

El reto mayúsculo de Rafa Benítez

En la prensa inglesa, se preguntan si el desafío que el técnico español tiene entre manos es más complicado que aquella remontada ante el Milan en Estambul en 2005.

El reto mayúsculo de Rafa Benítez
CARL RECINEAction Images via Reuters

En Inglaterra, los partidos se disputan tanto en el césped como en la grada. Las aficiones, lejos de ser meras espectadoras, toman partido. Con sus cánticos, sus rugidos y su ruido empujan a su equipo... o lo condenan. Locales y visitantes compiten por ver quién tiene más influencia sobre el juego, con sarcasmo, con sentido del humor y en algunos casos también con mala baba. En Goodison Park, antes, durante y después del partido se coreó el nombre de Rafa Benítez. Eran los aficionados del Liverpool. Celebraban su relación con el entrenador madrileño, que les llevó a ganar la famosa final de la Liga de Campeones en Estambul, y también el mal estado por el que atraviesa su rival ciudadano. Con regocijo. El Everton sacó 14 puntos en sus primeros siete partidos de liga, logrando su mejor arranque desde la campaña 2004/05. Pero en los siete últimos solo ha sumado un punto. Y el derbi del miércoles fue la gota que colmó el vaso. La goleada por 1-4 es la victoria más abultada de los rojos en el campo de los azules en 39 años. En la prensa inglesa, se preguntan si el reto que Benítez tiene entre manos es más complicado que aquella remontada ante el Milan en 2005.

A los 20 minutos del derbi, los visitantes ya vencían por 0-2, y la afición local no pudo contener su enfado y su frustración. No tanto con Rafa Benítez sino con la dirección del club. "Pedimos nil satis nisi optimum (solo lo mejor es suficiente), va siendo hora que el club haga lo mismo", se pudo leer en una pancarta en clara referencia a la directiva y al eslogan que porta el escudo del Everton. Mucha gente abandonó su asiento según progresaba el encuentro, y fueron bastantes los que se quedaron tras el partido a pedir la dimisión del presidente Bill Kenwright y del director deportivo Marcel Brands. Tras 14 jornadas, el Everton es 15ª con 15 puntos. Solo cinco por encima del descenso, y su objetivo más inmediato es no caer en el pozo de aquí a Navidad. Un reto complicado, pues se miden a un enrachado Arsenal, al líder Chelsea, visitan un campo complicado como el del Crystal Palace y posteriormente recibirán a un Leicester City dolido.

Algo huele a podrido en el Everton. Las bajas de Dominic Calvert-Lewin o Yerry Mina han afectado a los resultados del equipo. El delantero inglés marcó en las tres primeras jornadas antes de lesionarse, y su sustituto Salomón Rondón todavía no ha visto puerta. Hay escasez de recursos, pero no de dinero. Pese a que desde 2016 solo Manchester United, Manchester City, Chelsea y Arsenal han gastado más que el Everton, los de Goodison Park no han sabido conformar una plantilla competente desde que Farhad Nashiri tomara las riendas del club en 2015. Tampoco han dado con la tecla en el banquillo, siendo Rafa Benítez el sexto entrenador que ha tenido el club en seis años. Por ello, la destitución del madrileño solo empeoraría las cosas para un club que parece haber entrado en una espiral negativa. Mientras, Nashiri le ha mandado públicamente su apoyo a Benítez. "Rafa es un buen entrenador. Necesita tiempo para dejar su huella en la plantilla. El bajo rendimiento del Everton se debe en gran parte a las lesiones. No tengo ninguna duda de que tendremos una segunda mitad de temporada sólida", afirma el dueño.