Cubillo: "Hugo es muy maduro, parece que tiene diez años más"
El técnico madrileño, ayudante de Quique en el Getafe, vivió de cerca la explosión del delantero. "Su principal virtud es la cabeza", asegura.
David Cubillo (Madrid, 1978) fue de los primeros en comprobar el instinto asesino de Hugo Duro, hombre de moda tras su doblete al Atlético en el descuento. Cubillo apostó por el delantero en el Getafe B, en Tercera. El técnico le dio la alternativa a Duro cuando sólo era un crío de 17 años. Cubillo necesitó muy poco para darse cuenta de las virtudes del atacante. El madrileño destaca la facilidad que tiene Hugo para el gol, pero sobre todo su madurez y su cabeza. Desde el banquillo del Getafe, donde es ayudante de Quique Sánchez Flores, analiza para AS al delantero del Valencia.
Usted fue de los primeros que se fijó en Hugo Duro...
Yo entrenaba al filial del Getafe, en Tercera. Hugo estaba en División de Honor y seguí muy de cerca su evolución. Ya jugaba con gente más mayor que él y las cifras de goles que hacía eran muy elevadas. Lo subí al filial y terminó siendo titular en el playoff de ascenso a Segunda B.
Por lo que dice, siempre ha tenido facilidad para hacer gol...
Siempre se le han caído los goles. Tiene una naturalidad brutal de cara a puerta. No hace remates extraños ni tiros por la escuadra. Muchos de sus goles entran por el centro y puedes pensar que el portero es muy malo. Pero ese es su don, como en su día hacían Van Nistelrooy o Makaay. Cuando ves a delanteros de este tipo piensas en lo fácil que debe ser marcar gol. Esa virtud es muy poderosa.
Usted también vivió de cerca el debut de Fernando Torres en el Atlético. Fueron compañeros. ¿Le recuerda en algo Hugo Duro al Niño?
Fernando era más potente, a pesar de que era delgadín de niño se le veía que iba a tirar por la potencia. Yo a Hugo le veo diferente, más inteligente en el desmarque. Además, tiene otra virtud y es que por sus características también puede jugar en banda. En el Castilla lo hizo bien en ese puesto.
Pero a usted dónde le pondría. ¿De delantero o en banda?
Me gusta más de delantero, cerca del área. Pero ya le digo que es muy disciplinado y generoso en el esfuerzo. Por eso, puede jugar en banda. Pero su oportunismo de cara a puerta...
Esos jugadores valen dinero...
Ahora se habla mucho de manejar el juego, pero la contundencia en las áreas marca las diferencias. La gente que se mueve en esos parámetros vale dinero. El gol se paga en la actualidad bastante, pero ahora hay que estar tranquilos con Hugo y no forzarle a que marque dos goles todos los días, como ante el Atlético. Veo a Hugo tocado por esa varita, pero no es fruto de la suerte. Es todo trabajo.
Al margen del gol, ¿qué cualidades extra destacaría de Hugo?
Para mí, la cabeza es su principal cualidad. Es educado, viene de una familia extraordinaria y tiene gente a su alrededor que le cuida mucho. Está centrado, es estudiante y muy disciplinado. Si a todo eso, le sumas el don que tiene de ver la portería grande puede llegar donde quiera. Además, para mí ya está en un grande, como el Valencia. El jugador que rinde en un club como el Valencia tiene mucho ganado. No es lo mismo llegar a Primera y consolidarse con 21 años que hacerlo con 27 años. Eso dice mucho de Hugo. Además, es un jugador que desde juveniles, cuando le transmitías las cosas, te daba sensación de tranquilidad y madurez. Parece que tenga diez años más de su edad cronológica.
Bordalás confía mucho en él...
En el Valencia le va a ir bien. Además, Hugo siempre mira muy bien los pasos que da. Están siempre medidos. El año pasado aprovechó muy bien en el Castilla para jugar en el primer equipo y vivir experiencias en un grande. Dio un salto muy importante. Se nota que le gusta a Bordalás.
¿Qué anécdota le recuerda?
Me acuerdo mucho de verle por la ciudad deportiva del Getafe con su padre y viendo partidos de categorías inferiores. Se interesaba por todos los equipos. Es una familia que vive mucho el fútbol. Me acuerdo que comían en la ciudad deportiva y por la tarde se quedaban para continuar viendo partidos.