Mourinho y el 'club de los expulsados': ¡cuatro rojas!
El técnico de la Roma, Spalletti (Nápoles), Gasperini (Atalanta) e Inzaghi (Inter) fueron expulsados en la última jornada de Serie A. Todos por protestar...
Fue otro domingo de polémicas en la Serie A. En varios partidos de la novena jornada las decisiones arbitrales no convencieron, y las protestas de los banquillos pasaron factura. Hubo hasta cuatro entrenadores expulsados, y entre ellos no faltó José Mourinho.
El exmadridista llegó al Roma-Nápoles (0-0) tras días de tensiones por el batacazo ante el Bodo Glimt, y se notó bastante. En la primera parte fue amonestado por protestar en contra del colegiado Davide Massa, que había pitado una falta a favor de sus rivales, y en la reanudación por una razón parecida pateó una botella, ganándose su segunda amarilla. Vio el tramo final del enfrentamiento en la grada, aplaudido por los tifosi romanisti.
En el mismo enfrentamiento, también fue expulsado Luciano Spalletti, aunque en una situación diferente. El del Nápoles, después del pitido final, se acercó al colegiado para hablar de algunas decisiones y acabó la conversación aplaudiendo, algo que le costó la tarjeta. Según su versión, fue un malentendido: "Yo le estaba felicitando de verdad, porque a pesar de alguna decisión que no compartí hizo un gran partido. No entiendo esa roja".
Gian Piero Gasperini, técnico del Atalanta, tras el empate in extremis del Udinese con la Dea, también se acercó muy enfadado al árbitro. Le tocó la roja: "Fue algo absurdo, me expulsaron pero no hice nada. En Italia tenemos un enorme problema con los árbitros: estos señores deberían empezar a dar la cara, a hablar".
El domingo lo cerró el derbi de Italia, con el polémico penalti materializado por Dybala, que valió el 1-1. Simone Inzaghi protestó mucho cuando el árbitro, tras haber revisado las imágenes del VAR, concedió la pena máxima, fue expulsado y explicó sus razones ante las cámaras: "Son dos puntos tirados, el árbitro estaba ahí, dijo que era todo legal, luego le llaman a la pantalla y lo cambia todo. Es una pena, tuve un gesto de enfado y me equivoqué, pero también se equivocó él".
A pesar de las críticas, el jefe de los árbitros Gianluca Rocchi, en 'Radio Anch'io', dijo estar "muy satisfecho" con las actuaciones de los trencillas. Desveló, además, que "Mourinho y Spalletti pidieron perdón tras el partido", gesto que definió "muy inteligente".