El Coliseum, un campo maldito
El estadio azulón se le da rematadamente mal al Celta. Allí sólo ha ganado en una ocasión, hace cinco años, y sumó seis puntos de los treinta en juego.
Después de un decepcionante inicio de LaLiga y en plena crisis de resultados y de juego, al Celta le toca visitar un campo maldito, el Coliseum Alfonso Pérez. Allí los vigueses sólo fueron capaces de vencer en una ocasión y únicamente lograron cosechar seis de los treinta puntos disputados en diez partidos. Además, la imagen céltica acostumbra salir bastante dañada de Getafe.
El único triunfo se produjo en febrero de 2016, hace más de cinco años y medio, merced a un solitario tanto de Nolito. El héroe de aquel día regresará el lunes para intentar enterrar definitivamente la malidición azulona. Y es que además de los resultados, el Celta se ha llevado muchos más golpes del Coliseum.
Entre la colección de sucesos paranormales está la derrota que provocó el despido de Paco Herrera, la frivolidad de Luis Enrique al disponer un once plagado de suplentes, el décimo partido consecutivo sin ganar que a punto estuvo de suponer el cese de Berizzo o la doble amarilla más rápida de la historia sufrida por Maxi Gómez a manos de González Fuertes. Casi siempre que el Celta viaja al sur de Madrid le sucede algo imprevisto y nunca positivo.