Garitano sumará ante el Valladolid su partido 400 como entrenador
El de Bergara alcanzará tan llamativa efeméride entre un mar de incógnitas por el devenir del Leganés. Cogió su primer banquillo en el Alicante en 2009.
Asier Garitano, entrenador del Leganés, cumplirá el próximo domingo ante el Valladolid (Butarque, 16:00) su partido número 400 como entrenador de fútbol profesional sumando sus encuentros en Segunda B, Segunda y Primera División. Una efeméride que llega en un momento delicado para el técnico de Bergara. La segunda temporada de su proyecto 2.0 en Butarque está sufriendo demasiados vaivenes en forma de resultados negativos, lo que, unido a las elevadas exigencias que en los últimos tiempos rondan el sur de la capital, lo convierten en objeto de debate público en los mentideros blanquiazules.
Resulta llamativo porque, de vencer al Pucela en su partido 400 como entrenador, Garitano sumará los mismos 12 puntos que tenían los pepineros a estas alturas de temporada la campaña 15-16, la del ascenso a Primera División. Pero, mientras que entonces el curso arrancó sin más exigencia que mantener en la categoría, ahora al Leganés se le exige orbitar en la zona noble de la tabla y ser (sí o sí) candidato a retornar a la élite. Son las consecuencias de haber pasado cuatro campañas en la élite y ser, de vuelta a Segunda, uno de los presupuestos más poderosos de la categoría. Al Lega ahora se le exige más, muchísimo más. También a Garitano.
El entrenador, por ahora, no peligra en el puesto salvo que la semana que viene los resultados blanquiazules rocen de nuevo la tragedia. En siete días el equipo afrontará tres duelos complejos, pero competitivamente asumibles ante Valladolid (Butarque), Alcorcón (Santo Domingo) y Tenerife (Butarque). Sumar una buena cosecha en esta semana decisiva puede disipar cualquier atisbo de dudas. Lo contrario no haría más que reanimarlas. Del bagaje dependerá el pálpito en torno al entrenador.
Una trayectoria en siete equipos
Garitano ha dirigido a siete equipos. Su carrera inició en el Alicante, donde primero ejerció de asistente de José Bordalás (ahora en el Valencia) y después de José Carlos Granero. La destitución de este último le permitió coger por primera vez las riendas de un equipo como entrenador titular, aunque fuera sólo por tres jornadas. Sucedió en la campaña 2008-2009, en Segunda División.
Un curso después, sufrió una situación parecida al hacerse cargo del banquillo del Castellón después del despido de Tintín Márquez. Tuvo once partidos de un proyecto ya desahuciado que descendió a Segunda B con la promesa de que él, de que Garitano, se haría con las riendas del proyecto el curso siguiente. Pero la directiva cambió de opinión y el preparador tuvo de nuevo que salir, esta vez para volar solo primero como entrenador del Orihuela (disputó ahí su primer playoff de ascenso a Segunda) y después del Alcoyano, donde no pudo terminar la temporada en marzo de 2013.
El lustro dorado en Butarque
Poco después la vida le cambiaría por completo. Garitano se hizo con las riendas del Leganés para encadenar el lustro más glorioso de la historia de los pepineros. Esa temporada ascendió a Segunda y, dos cursos después, logró llevar al equipo a Primera División por primera vez en su historia y contra todo pronóstico. Ya en la élite, mantuvo al equipo dos temporadas y logró asomarlo a las semifinales de la Copa del Rey tras eliminar al Real Madrid en una remontada inédita: 0-1 en Butarque y 1-2 en el Bernabéu. El famoso ‘Pepinazo’.
El 7º con más partidos de Segunda
Tras Leganés, Garitano sufrió dos experiencias traumáticas. La primera, en la Real Sociedad, donde fue destituido poco antes de Navidad, el 21 de diciembre de 2018. Después, en el Alavés, donde también fue cesado, esta vez en la jornada 34, a falta de cuatro para acabar la temporada. En 2021 retornó a Leganés para hacerse con las riendas del proyecto blanquiazul tras la salida de Martí. Dejó a los pepineros terceros y jugó un playoff de ascenso a Primera que se esfumó en la primera ronda, ante el Rayo Vallecano. El resto, es historia de la actual temporada.
Con sus 399 partidos, Garitano es el séptimo entrenador con más partidos profesionales de los que entrenan en Segunda por detrás de Mel (721), Oltra (629), Ziganda (498), JIM (432), Ambriz (427) y Rubi (423). En lo que a partidos de Segunda se refiere, es el sexto con más partidos de los 22 que ahora dirigen en la categoría con 128 partidos, el 32% de su carrera. El resto se reparte entre Primera (127, el 31,8%), Segunda B (107, el 26,8%) y otras competiciones (37, el 9,2%).