Javier Fernández: “Parece que hablamos de dos clubes en guerra y es solamente rivalidad”
El periodista preguntó si la solución de este conflicto estaba más en manos de la Delegación del Gobierno o del Oviedo. En ese momento, el presidente del Sporting sonrío, respiró profundo y comenzó diciendo: “Voy a ser prudente porque, quien asiste a las reuniones, la portavocía de una parte no la lleva quien debería”. Javier Fernández señalaba al club azul como dejó caer después en su respuesta a la última pregunta de la comparecencia ante los medios tras la inauguración de la nueva Puerta 9 de El Molinón que recuerda a Quini.
La explicación íntegra del presidente del Sporting fue la siguiente: “La Delegación del Gobierno solo hace que coordinar lo que escuchan las policías. Las policías, en este caso los coordinadores de seguridad, actúan en función de lo que escuchan a los representantes de los clubes y sus aficiones. Si nuestros representantes pretenden y quieren un fútbol normal, que la gente se pueda desplazar con normalidad, que es lo civilizado porque parece que estamos hablando de dos clubes en guerra y esto es una rivalidad; no hay más que eso. Será que la otra parte no quiere y plantea unas medidas que son distintas a las que nosotros vemos como lógicas. Eso lleva a la policía a tomar unas determinaciones. No me quiero extender más porque se hace duro soportar muchas cosas que están pasando”.
La conclusión es que el primer derbi asturiano postpandemia tampoco contará con sportinguistas en las gradas ni en el palco del estadio Carlos Tartiere el próximo sábado. Las relaciones entre el Oviedo y el Sporting ha retrocedido dos años atrás cuando estalló el mismo conflicto, en noviembre de 2019, por las mismas razones.
Segunda reunión
Después de una segunda reunión en la Delegación del Gobierno, el Sporting se ha ratificado en su decisión de rechazar la venta de las casi 600 entradas que le había enviado el Oviedo para despachar entre los seguidores rojiblancos y, como consecuencia de la ausencia de aficionados sportinguistas, tampoco habrá representación de la entidad gijonesa en el palco.
El Sporting emitió un comunicado tras la primera reunión en la tarde del miércoles en la que ya adelantaba la medida que iba a adoptar. El motivo no es otro que considerar, como hace tres años, un “trato discriminatorio y desproporcionado hacia sus aficionados” a quienes obliga a concentrarse en Gijón varias horas antes del encuentro para trasladarse de manera conjunta y bajo control policial a Oviedo. De igual modo, la salida del estadio será tiempo después de que sea desalojado el resto del aforo.
No había ninguna esperanza en que se fuesen a producir cambios en la segunda reunión, prevista para la mañana de este martes, hasta el punto de que Carlos Barcia, responsable del área corporativa del club, fue el único representante del club. No hubo representación del Consejo de administración ni de las peñas como en el primer encuentro.
Por parte del Oviedo acudieron a la cita Federico González, asesor de Carso; Fernando Corral, portavoz del consejo; y David Alonso Mata, gerente de la entidad, además de Javier Pérez y Jaime Campillo, presidente y vicepresidente de la Asociación de Peñas del Real Oviedo (APARO). Junto a ellos, responsables de la Policía Nacional, de la Guardia Civil y de la Policía Local de Oviedo, así como la directora General de Deportes del Principado, Beatriz Álvarez Mesa. La reunión fue presidida por la Delegada del Gobierno en Asturias, Delia Losa.
Relaciones entre clubes
“No existe ningún sitio donde la afición en general tenga que ir encapsulada y con una previsión de horas antes de salir hacia el campo y horas después para salir del estadio”, apuntó Javier Fernández, que recordó que hay aficionados del Sporting repartidos por toda Asturias. “Hacer a gente de Mieres, de Vegadeo, de Llanes o de Ribadesella venir a Gijón para luego hacer el viaje a Oviedo y volver, no tiene ningún sentido. No tiene precedente”, insistió. Fernández recordó que el control siempre existió sobre los aficionados de las llamadas gradas de animación, donde se sitúan los seguidores más radicales. “Pero ni siquiera se llegó a entrar en ello”, aseguró.
El presidente del Sporting volvió a hablar de las relaciones con el Oviedo y recordó que fueron rotas en su momento por la entidad azul. “Quienes rompieron las relaciones fueron ellos a raíz de unos supuestos incidentes en El Molinón que no nos trasladaron en las 24 horas siguientes al partido. Por tanto, son ellos los que tienen que dar el paso. Nosotros hemos dado pasos internos, a través de gente que tiene relación a nivel personal, pero todo esto se ve truncado cada vez que esto sale a la luz pública”, explicó Fernández. Se da la circunstancia que el vicepresidente del Sporting, Javier Martínez, y el consejero portavoz del Oviedo, Fernando Corral, son vicepresidentes de Otea, la patronal de la hostelería en el Principado.