Este Casemiro es otro Casemiro
Los números del brasileño, que cuajó un partido muy discreto contra el Sheriff, están lejos de la mejor versión del mediocentro: recuperó menos balones y no interceptó ningún pase.
El rendimiento de Casemiro es un termómetro del estado de ánimo del Real Madrid. Si el brasileño está inspirado, muchas de las carencias del equipo blanco se enmascaran. En defensa, pero también en ataque, donde la pasada temporada apareció más de una vez al quite cuando el gol escaseaba. Si al equipo se le nubló el camino hacia la portería del Sheriff, a Casemiro le salió un partido gris, lejos del nivel al que acostumbra en el Real Madrid.
El brasileño está, en este inicio de temporada, por debajo de sus promedios. Según datos de BeSoccer Pro considerados por cada 90 minutos (ver imagen adjunta), el pivote madridista gana menos duelos defensivos y aéreos, es regateado en más ocasiones e intercepta menos pases y recupera menos balones que en las dos temporadas anteriores. Recupera más en campo rival, pero menos en el propio. Su influencia en la construcción del juego es ligeramente menor, con menos pases progresivos completados. Y comete más faltas, indicio de las dificultades que está encontrando para solventar las situaciones con las que se encuentra enfrente.
Contra el Sheriff hizo uno de los partidos más flojos de la temporada. En los 66 minutos que jugó (fue de los damnificados por el cuádruple cambio que Ancelotti hizo de golpe) apenas recuperó tres balones (con el promedio de su carrera en el Real Madrid, habría recuperado entre cinco y seis veces el esférico en ese tiempo jugado), no interceptó ningún pase del rival y fue regateado tres veces.
Clasificación | PTS | PG | PE | PP |
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Próximos partidos |
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Casemiro sigue siendo una pieza indispensable en el equipo madridista. Lo era con Zidane (ha sido el jugador de campo con más minutos de los blancos en dos de las tres últimas temporadas) y lo es también con Ancelotti, quien ha reconocido públicamente que no cuenta con un recambio específico para paliar las ausencias del brasileño. El técnico contempla como alternativa un doble pivote en el que ha empleado al propio Case (junto a Modric contra el Villarreal y con Camavinga frente al Sheriff). Pero mientras Carletto encuentra una solución satisfactoria, el 14 sigue siendo fundamental en el engranaje blanco aun a la espera de su mejor versión.