Pedro León se corona rey de la selva del Torres
El atacante murciano es el líder del nuevo Fuenlabrada a base de trabajo y tres goles que le colocan como pichichi del equipo.
La afición del Fuenlabrada andaba por julio enfadada tras la marcha de Nteka y Pathé Ciss, estrellas en el Fernando Torres, al Rayo Vallecano el mismo día. Y tan sólo cinco después, el 1 de agosto, la dirección deportiva azulona soltó la bomba del mercado de Segunda anunciando la contratación de Pedro León. El exmadridista, con 346 partidos en Primera, 42 goles y 62 asistencias, pasaba a engrosar las filas kirikas. Salto de nivel para el equipo que hace tres años disputaba la extinta Segunda B.
Un fichaje que no sólo llegó para hacer las delicias de su nueva afición. Sucede que en el seno del equipo del sur de Madrid nunca se dudó del estado físico del murciano, maltrecho los últimos años por tres graves lesiones en el pie y rodilla izquierdos y la espalda. La confianza en su nivel era y es total en el Fuenla. Por ello, se le dio plenos poderes deportivos desde el minuto uno.
Titular indiscutible las siete jornadas disputadas, con un total de 592 minutos, su técnico Oltra le ha colocado en una banda derecha que ya es de su propiedad. No fue así en el inicio de la competición ya que el valenciano probó, con menos suerte, a Pedro León como segunda punta.
Su posición como interior derecho permite al 14 azulón exhibir sus principales cualidades: el regate y, sobre todo, el golpeo con ese pie derecho que funciona como un fusil de precisión. Lugo, con quien Pedro León estreno su cuenta goleadora como fuenlabreño, y Cartagena ya han sido ajusticiados por él. Tres tiros certeros que colocan al murciano como pichichi de los suyos. Además, lidera varias estadísticas: ocasiones creadas (15), remates a puerta (8) y centros al área (52).
Sin embargo, no sólo con cifras se puede medir el peso del interior en el equipo del Torres. Pedro León dirige el juego de los suyos (con Cristóbal como principal aliado), es el encargado de botar cualquier saque directo y, además, su implicación defensiva es total.
El matrimonio Pedro León-Fuenlabrada pasa por su mejor momento. Tanto es así que el lunes se consiguió la primera victoria como local por obra y gracia del Rey León.