La paciencia ilimitada de Michel
El técnico sólo ha sumado ocho puntos en las siete primeras jornadas con el Girona. Cuando subió con el Rayo a Primera, los madrileños únicamente llevaban un punto más.
En el mundo del fútbol no acostumbran a existir grises. No hay término medio y los resultados mandan, pero se debe confiar en el proceso. Michel está centrado en hacer creer a los jugadores del Girona que sus ideas son las que les llevaran al éxito esta temporada y la confianza que ha recibido por parte del grupo y la directiva es total. Pero él también debe lidiar con el peso de la presión. Tras siete jornadas, el Girona sólo ha sumado ocho puntos y la parte positiva es que el primero en hacer autocrítica. La paciencia es clave para que todo fluya con normalidad y Michel es lo que solicita.
El Girona confió en él porque se cree que es el idóneo para hacer olvidar a Francisco e intentar dar el salto de nuevo a Primera. Tiene experiencia en ello y eso es un valor que fue clave en la toma de la decisión. De ahí, que actualmente pese a los ocho puntos cosechados en siete jornadas, la confianza y paciencia que se tiene con él es ilimitada. Y encuentra aún más apoyo cuando se presenta un dato que permite ser optimista. Con el Girona, de 21 puntos posibles, lleva ocho. Pues bien, con el Rayo, en su primer ascenso como entrenador a Primera, la temporada 2017-18 el conjunto madrileño ‘únicamente’ llevaba un punto más: nueve. El inicio, como el actual, tampoco fue del todo positivo, pero hubo final feliz y el Rayo festejó el ascenso al finalizar la Liga como campeón con 76 puntos.
A ello se agarra un Girona que anhela regresar cuanto antes a Primera. Michel tiene trabajo por delante porque ha recogido a un equipo que lleva dos finales de playoff perdidas. El trabajo psicológico está siendo encomiable y, además, también está intentando cambiar un estilo de juego (3-5-2) que estaba tremendamente arraigado. El técnico quiere que los jugadores sean un bloque y, de momento, la asignatura pendiente está siendo el ataque. Esta semana de trabajo se está incidiendo en ello. El lunes llega el Almería, segundo clasificado de Segunda, y una gran piedra de toque. Hay paciencia y confianza, pero toca sumar de tres en tres.