REAL VALLADOLID 2 - ALCORCÓN 0
Aprobados y suspensos del Pucela: Aguado se suelta el pelo
El mediocentro andaluz lidera la victoria del Real Valladolid con un gol y con una de sus mejores actuaciones como profesional.
Álvaro Aguado lideró al Real Valladolid en su reencuentro con la victoria en un partido convincente, de voluntad ofensiva por parte de los blanquivioletas, que pudieron golear a un Alcorcón que dio pocos signos de peligro. El mediocentro andaluz se desmelenó al fin como futbolista de Pucela, mostrando su abanico de recursos técnicos y abriendo la cuenta en favor de los de Pacheta.
Roberto: Sacó un rechazo afortunado para el Alcorcón con una buena parada. El resto del partido fue casi un espectador, más allá de su participación con el balón en salida de balón cuando el Alcorcón achuchó arriba.
Luis Pérez: Asomó en el último tercio varias veces en el inicio, aunque esas subidas no fueron un continuo, quizás debido a la presencia de Plata. En defensa fue un bastión infranqueable.
Kiko Olivas: Se animó a pisar campo rival a pesar de cambiar el perfil, lo que hizo que se le notase la lateralidad cambiada en alguna jugada. Como al resto del equipo, se le notó más cómodo con una ocupación más equilibrada del campo.
Diogo Queirós: Gestualmente correcto, aunque cuando se vio obligado a hacer coberturas a Kiko Olivas se le vio timorato. También se le notó algo cohibido a la hora de progresar en campo rival... y sin embargo, su actuación fue buena.
Olaza: Más participativo en tres cuartos; mejor, incluso. Llegó a la línea de fondo en varias ocasiones y se le vio también en alguna en el pasillo interior, sobre todo en el segundo periodo, en el que incluso se animó con un disparo.
Plata: Muy enchufado desde el inicio, técnico y bonito de ver, algo que agradeció el público en los primeros compases. Se desquició con el árbitro al sentir falta en varias entradas rivales. Ayudó a Luis Pérez atrás.
Roque Mesa: El capo en la salida de balón, buscó el gol con un disparo raso a la media hora. Comandante en jefe, a menudo se le vio dando órdenes a sus compañeros como si de un base de basket organizando a sus compañeros se trataba.
Aguado: Recuperó y rompió bien líneas para asomar en el área y marcar el 1-0 con un toque sutil. Se asoció con Roque Mesa y se sentaron bien. Una ruleta y un taconazo, este en asistencia a Weissman, le hicieron que se ganase la ovación.
Toni Villa: Arrancó en la banda izquierda, pero con libertad para aparecer en zonas interiores cuando fuera necesario. Aguerrido, recuperó varios balones ayudando en la presión y en el repliegue. Le faltó un puntito en campo rival.
Weissman: Más intervencionista que en partidos anteriores, como demostró con la asistencia a Aguado. Con todo de cara, disparó alto, solo, el pase del andaluz. Lo intentó por todos los medios hasta que consiguió la sentencia.
Sergio León: Animoso, aunque no exactamente ruidoso, durante el primer tiempo. Buscó la portería de Dani Jiménez en el arranque de la segunda mitad con un disparo cruzado. El cancerbero evitó un golazo suyo de volea.
Anuar: No alcanzó a rematar un buen centro de Sergio León. Jugó como falso extremo, ayudando a oxigenar con balón en zonas interiores.
Óscar Plano: Culebreó en la frontal del área y se la dejó a Cristo para que encarase al portero. Intermitente, pero ansioso cada vez que entraba en juego.
Cristo: Su primer disparo acabó en el cuerpo de Dani Jiménez, que achicó bien espacios. Asociativo, se la dejó a Weissman para el tercero, pero lo frenó la zaga.
Janko: Refrescó el lateral derecho en los minutos finales. El Alcorcón llegó por su lado un par de veces, aunque sin incidencia en el resultado.
San Emeterio: Entró para asegurar la victoria en el centro del campo con piernas frescas.