Denis Suárez no levanta cabeza
Después de vivir el verano más convulso de su carrera al enfrentarse con el presidente Mouriño, ha empezado la temporada a un nivel muy bajo.
La situación de Denis Suárez en el Celta va de mal en peor. La temporada pasada rindió a gran nivel desde la llegada de Coudet, pero su enfrentamiento con Mouriño parece que le está pasando factura. Las duras palabras del presidente le han afectado psicológicamente y eso se está trasladando al terreno de juego, donde Denis Suárez está más gris que nunca.
El juego de Denis apenas está teniendo incidencia en el equipo. Realiza demasiados pases horizontales, no arriesga lo necesario para encontrar grietas en el equipo rival y se le ve cada vez más cabizbajo, con menos confianza. El Celta necesita su visión de juego para tener mayor presencia en ataque. Siempre reivindicó que su posición está en el centro del campo, pero debe demostrarlo con un mejor rendimiento.
En el último partido quedó señalado por Coudet, pues fue uno de los tres sustituidos al descanso tras la pésima primera parte del equipo contra el Cádiz. Sin él en el césped, el Celta mejoró notablemente y rozó la remontada. Generó muchas ocasiones de gol, algo que no había sucedido en el primer acto. Ahora habrá que ver si el Chacho lo envía al banquillo o sigue confiando en su calidad para buscar la primera victoria de la temporada.
Hay una frase de Mouriño en aquella comparecencia en la que cargó contra Denis que cobra ahora mayor protagonismo: "Denis tiene dos opciones: que se imponga su parte comercial al Celta y no rinda o que procura rendir al máximo, haga un gran año y consiga un súper contrato. Le recomiendo lo segundo porque si sigue con ese representante no vamos a negociar una renovación y en el último año de contrato ya sabéis que aquí es muy difícil jugar". Denis no está rindiendo, aunque eso seguramente no tenga que ver con su parte comercial. Lo que sí es cierto es que a este paso no encontrará una gran oferta el próximo verano. Tiene tiempo para reaccionar.