El alumno aventajado de Mou empieza a levantar cabeza
Dominik Solanke era la joya de la cantera del Chelsea, pero entró en barrena. Ahora, en el Bournemouth y tras un paso infructuoso por el Liverpool, comienza a ver la luz.
"Es simple, si, en unos años, Baker, Brown y Solanke no son internacionales, debería culparme a mí mismo. En cuanto se conviertan en jugadores del Chelsea, lo serán de Inglaterra, estoy casi seguro de ello". José Mourinho mostraba así su confianza en el trío de oro de Cobham, centro de entrenamiento blue. Tres meses después, el tercero, de nombre Dominic y con un sinfín de goles en categoría inferiores a sus espaldas, se convertía en el debutante más joven en Champions de la historia del Chelsea.
Ese día, en 2014 y ante el Maribor, con apenas 17 años, jamás lo olvidará. Sin embargo, su carrera no seguiría los derroteros que The Special One esperaba. Ni la de sus compañeros. Lewis Baker sigue perteneciendo a la entidad, pero por falta de ofertas. Izzy Brown juega en el Preston, en Championship. Los tres cuentan con un solo partido con el primer equipo del Chelsea a sus espaldas. De los tres, Solanke era el que parecía destinado, de manera irremediable, al estrellato.
El más prometedor del país
Compañero inseparable de Tammy Abraham, llegaron a marcar 41 tantos cada uno en la 2014-15. El terror de las categorías inferiores, fue nombrado mejor jugador joven de Inglaterra esa misma temporada (compartió foto con Rooney, ganador en categoría senior). El guion parecía estar escrito por él mismo, pero todo se torció. Ahora, recién cumplidos los 24 años, también juega en Championship, como su amigo Izzy, en el Bournemouth. Sin embargo, el delantero, con cinco goles y una asistencia, es el líder del líder. Solanke se despereza y comienza a ver la luz. Está a tiempo.
"En mi carrera profesional, estoy en el mejor estado mental de siempre. Marco goles con regularidad, que es algo que siempre he disfrutado desde que era niño. Simplemente, soy feliz por cómo van las cosas", explica en una extensa entrevista concedida a The Athletic, en la que se abre y pone en contexto los siete años transcurridos entre ese debut entre campanillas y el tanto al Queens Park Rangers (2-1) con el que celebraba su 24 cumpleaños y la victoria de su equipo.
"Con Mourinho siendo uno de los mejores entrenadores del mundo, son palabras bonitas de escuchar", reconoce, al respecto de la famosa declaración del portugués. "Pero, ¿puso una valla extra de presión y expectativa sobre mí? Sí. Sin embargo, es algo que debes saber llevar", prosigue. Dominic explica que su transición no fue todo lo suave que podría haber sido, pero no pone excusas, aunque reconoce que Vitesse, "no era el destino favorito". Habla de su cesión al conjunto de la Eredivisie, en 2015. Tenía 18 años y no le fue mal: siete goles en 25 partidos.
"Jamás faltaría al respeto al Chelsea"
No obstante, Mourinho se marchó y los números no fueron suficientes para Antonio Conte. Pero el Chelsea no le mandó a una nueva cesión, ni tampoco renovó el contrato. Pasó todo el curso con el plantel sub-23 y se llegó a publicar que el problema era pedía demasiado para firmar un nuevo acuerdo. El medio que publicó la información tuvo que disculparse, aunque su imagen ya estaba dañada. "Me dolió, yo solamente quería jugar al fútbol. Jamás faltaría al respeto al club en el que estuve desde los siete años", lamenta.
Libre, el Liverpool de Salah, Mané y Firmino le ficharía. Una temporada y media saldada con cuatro tantos que salpicaron la falta de oportunidades que se le presentaron. Aún así, el Bournemouth, apostaba fuerte por él en enero 2019. 21 millones de euros. Negocio redondo para los reds por un jugador sin la confianza de Klopp. La presión de la Premier pudo con él y tardó un año en ver puerta con los Cherries. Se consumó el descenso y en Championship se han vuelto a ver retazos del futbolista prometedor que en su día fue.
Un paso atrás, para dar dos adelante
15 goles y 11 asistencia en la 2020-21 y ya consolidado este curso como una de las estrellas de la competición. Candidatos al ascenso, el Solanke que volvería a la Premier sería otro. Aún joven, pero sin la carga de la expectativa sobre él. De su etapa en Anfield recuerda a Van Dijk: "El mejor central al que me he enfrentado". Pronto podría tenerlo enfrente, como rival. Aquello de dar un paso atrás para dos adelante, pues eso.
¿Si se plantea una llamada de Gareth Southgate (ya jugó un partido en 2017 contra Brasil)? No lo descarta: "Es algo que me gustaría empezar a valorar de nuevo. Cuando no jugaba, era complicado hacerlo. (...) Espero que podamos volver a la Premier y, a partir de ahí, seguir adelante". Paso a paso, pero el alumno aventajado de Mourinho levanta cabeza. Quizá el portugués simplemente calculó mal los tiempos de su predicción...