Fútbol en zona catastrófica
Un sinfín de clubes modestos, también Barcelona y Espanyol, se vuelcan con el Alcanar, que "lo perdió todo" en el terrible temporal de hace una semana.
No, no se trata de un campo de tierra, aunque a día de hoy evidentemente lo parece. El césped artificial lucía brillante en La Fanecada hasta que el pasado miércoles, 1 de septiembre, quedó sepultado bajo un terrible manto de lodo, fruto del temporal que asoló las Terres de l'Ebre. El Club de Futbol Alcanar, localidad que registró precipitaciones de 217 litros por metro cuadrado –de los cuales, 77 en apenas media hora– se llevó la peor parte, desde el punto de vista deportivo. Y ahora trata de resurgir, con el esfuerzo que solo el fútbol modesto lleva de serie, y con algunas sorpresas, la mayoría afortunadamente positivas, en medio del drama.
"Lo hemos perdido todo", rezaba el mensaje de alerta que el CF Alcanar difundía la semana pasada a través de las redes sociales. Un llamamiento al que respondieron conjuntos de la zona como La Rapitenca –que para este domingo, día 12, ha organizado un amistoso solidario contra sus vecinos–, Tortosa, Remolins, La Floresta, La Sènia o L'Ametlla de Mar. "En total, unos 25 clubes nos han ofrecido ayuda", recuenta Miguel Agustí, el presidente de la entidad damnificada, que atiende a AS entre reunión y reunión para encontrar, como tarea más urgente, un campo cercano en el que el Alcanar pueda entrenarse e iniciar la Liga, en Tercera Catalana, el próximo 3 de octubre.
"Entre los clubes que han llamado también están Barcelona, Espanyol, Sabadell o Cornellà", destaca Agustí, quien señala que tanto azulgrana como pericos "nos han pedido un listado con todo el material que nos hace falta, supongo que para hacérnoslo llegar, y la posibilidad de disputar más adelante un partido con alguna categoría". Hay esperanza. Y, en el caso del Espanyol, este mismo miércoles se reunirá con un representante de las peñas.
"Soteras… no nos hace falta"
Pero no todo están siendo ayudas. Lamenta el presidente del Alcanar, sin pelos en la lengua, que "el único que no se ha involucrado, y tendría que haber sido el primero, es nuestro estimado presidente Soteras (máximo mandatario de la Federació Catalana de Futbol). No he recibido ninguna llamada ni interés de ningún tipo por su parte. En fin, tampoco nos hace falta", remacha.
En efecto, casi todo el mundo se ha volcado con los 'canareus', incluidos sus propios jugadores, quienes el sábado se pasaron el día de sol a sol tratando de limpiar el palmo largo de fango que cubría el terreno de juego. "El Ayuntamiento ha pedido la zona catastrófica y el campo, desde luego, lo es. Debe construirse de cero", remarca Agustí, además de relatar cómo la zona de vestuarios, que se sitúa seis escalones por debajo, quedó absolutamente anegada, con agua hasta el techo, por lo que se echaron a perder toda la documentación y el material, salvo unos conos, "y porque son de plástico".
Pese a todo, y mientras Alcanar trata de despertar de esta pesadilla que fueron las lluvias torrenciales, el presidente de su club de fútbol ya piensa como cualquiera que ama este deporte. "Además de buscar un campo cercano, ya encontraremos donde sea la ropa para entrenarnos y jugar. Pero nosotros lo que queremos es competir", declara. Un brote verde en la catástrofe.