Kodro: "Valoro que Marcelino fuera sincero"
"Estoy muy orgulloso de haber pertenecido a este gran club, aunque no haya salido como quisiera. Me hubiese gustado jugar más", lanza desde su aventura en Hungría.
El delantero donostiarra de origen bosnio Kenan Kodro, que rescindió contrato con el Athletic tras unas arduas negociaciones este verano, se enroló en el Fehérvár FC de la Primera de Hungría. Tras una etapa casi sin oportunidades en Bilbao y una cesión en el Real Valladolid, se enfunda en una aventura que rentabilizó de inmediado.
El ya exleón, de 28 años, ingresó a los 62 minutos en su debut con el Fehérvar anotando dos goles para otorgarle el triunfo (2-1) a su nuevo equipo. En apenas seis minutos, el delantero marcó la primera diana desde los once metros y el segundo con la testa para voltear el luminoso. "Estoy muy bien, adaptándome y jugando ya partidos que es lo que quería, aunque no creáis, me está costando estar fuera de lo que es Euskadi", realta en una entrevista en Onda Vasca, en la que confiesa que "hay quien prioriza quedarse en Lezama, pero tengo ambición y hambre, quiero jugar. Por eso pedí entrenar con el Bilbao Athletic", apunta ante las sesiones que vivió en el filial para sanar del todo su quinto metatarsiano.
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Kodro insiste en que no le duelen prensas para coger la malera de ruedas: "Al final somos jóvenes con hambre, yo quiero y necesito jugar. Sólo te sientes futbolista jugando al fútbol, si estas donde no vas a tener protagonismo o no te quieren lo mejor es irse e intentar ser feliz para que te salgan las cosas", desliza. "Vivimos de las sensaciones y si no juegas los fines de semana son complicados", remata. Sobre su fichaje por el Athletic desde Dinamarca en el mercado invernal de hace dos campañas entiende que aterrizó "en un momento complicado con Aduriz lesionado, llegué no sonando mucho pero me voy con la conciencia muy tranquila y habiendo dado el máximo siempre, jugase o no. He entrenado al cien por cien, en los partidos a veces he marcado, otras no, pero la vida es así", relata.
En el Athletic se ha sentido muy identificado tras su pasos por Real Sociedad u Osasuna: "Estoy muy orgulloso de haber pertenecido a este gran club, aunque no haya salido como quisiera. Me hubiese gustado jugar más, pero me han tratado súperbien, los compañeros y todo el club, fisios, médicos, etc... Voy a mantener la relación con ellos, son gente cercana, eso te marca. Ahora la puerta está cerrada aunque no sabes si puedes volver a Bilbao o no", zanja y deja claro que "a Rafa Alkorta le tengo mucho aprecio, apostó por mí y siempre le voy a estar agradecido" y que Marcelino García Toral fue de frente: "La relación con Marcelino no fue mucha al coincidir poco, sí valoro que fuese sincero, hablé con él y me dijo que iba a jugar poco, y aunque te duela esa es la realidad y se prefiere eso a que no te digan nada", sostiene.