Riqui Puig toca fondo
Koeman envió al canterano un mensaje clarísimo: si quieres jugar, búscate otro equipo. Inédito este curso y superado por chavales como Gavi y Demir, su futuro es incierto.
A Riqui Puig se le intuyó una sonrisa en día que Joan Laporta ganó las elecciones. Aún más cuando el flamante presidente pregonó su cariño hacia el centrocampista, que se refrendó posteriormente con abrazos cómplices durante un torneo veraniego de golf. Todo apuntaba que el rol del de Matadepera iba a cambiar respecto a la temporada y que Ronald Koeman se lo iba a mirar con otros ojos.
Pues bien, la realidad es que si algo ha cambiado para Riqui Puig ha sido a peor. Y es que el ninguneo por parte del técnico holandés hacia el joven centrocampista se ha radicalizado en este inicio de curso, hasta el punto que se ha visto superado por chavales recién llegados como el austríaco Yusuf Demir o el canterano Gavi, este último tras debutar contra el Getafe con sólo 17 años recién cumplidos.
Si el verano pasado, Koeman ya le abrió públicamente las puertas a Riqui Puig, recomendándole una salida, ahora ha optado más por los hechos que por las palabras, dejando al canterano inédito en las tres primeras jornadas de LaLiga. Ni la baja con permiso de Pedri ante el Getafe, le ha abierto una pequeña grieta para asomarse: primero Sergi Roberto como titular y después el jovencísimo Gavi fueron los que se hicieron acreedores a esa plaza.
La situación de Riqui Puig es extremadamente delicada: un talento de este nivel no puede pasarse un año más prácticamente en blanco. La temporada pasada fue uno de los jugadores que menos utilizó Koeman, solo superado por el 'despedido' Matheus Fernandes. Y ahora va camino de empeorar, si se puede, su ya depauperado protagonismo: actualmente Koeman ha dado minutos ya a 20 futbolistas; sólo Riqui Puig, Samuel Umtiti, Miralem Pjanic y Álex Collado aún no se han estrenado.
Pero es el caso de Riqui Puig el que tiene especialmente en vilo al club, ya que el área deportiva lo considera un jugador aprovechable, pero Koeman le ha hecho la cruz hace ya tiempo y no parece que vaya a ceder tan fácilmente. De ahí, que en la entidad blaugrana no se descarta llegar a un acuerdo 'in extremis' para buscarle una salida al jugador, siempre en forma de cesión, consciente que dos años consecutivos sin jugar partidos ni tener continuidad puede ser del todo contraproducente en su carrera.
Koeman ha demostrado, por activa y por pasiva, que no cuenta con Riqui Puig y quizás el jugador haya captado definitivamente el mensaje. Ahora mismo, quedarse en el Barcelona es la solución más incómoda para todos: para el entrenador, que no lo quiere y considera que le sobran futbolistas en la plantilla, para el jugador, porque se le corta su progresión y para el club, porque ve un talento como el suyo desperdiciándose de forma incomprensible.