Odegaard ganó 22M€... en solo 13 partidos en el Madrid
El paso del noruego por el Madrid no ha sido productivo en lo deportivo pero ha estado regado en dinero. Sueldo astronómico, comisiones, renovaciones al alza y seis cesiones...
Niño prodigio, futuro Balón de Oro, "fichaje de márketing", talento sin paciencia... del paso de Martin Odegaard por el Real Madrid se ha dicho de todo, pero hay dos cuestiones que no admiten debate: se va al Arsenal sin haber dado en Chamartín más que 13 partidos intrascendentes en el primer equipo (sin goles) y por el camino han sido seis años de blanco regados en millones en forma de un sueldo monumental, comisiones, renovaciones al alza y todo ello durante una hoja de servicios que incluye seis cesiones a otros equipos. El resultado es que Odegaard se ha embolsado 22 milllones de euros desde que es futbolista profesional y el Madrid sólo le ha disfrutado en 624 minutos oficiales...
Lo de que el wonderboy nórdico fue un fichaje "de relaciones públicas" lo confesó, al poco de salir del Madrid y en un libro, el propio Ancelotti. El italiano quizá exageró, porque Odegaard estuvo muy tentado por Bayern y Arsenal (precisamente) hasta el punto de visitar ambos clubes para conocer sus ofertas. Y el noruego supo sacarle provecho. El fichaje le costó al Madrid 2,3 millones que fueron al Stromsgodset más otros 3M€ que se embolsó el padre del talento nórdico, Hans-Erik, por el traspaso. Un prima camuflada según desvelaron los papeles de Football Leaks en su sueldo de entrenador en las categorías inferiores de Valdebebas.
El primer contrato de Odegaard recién alcanzada la edad mínima para poder trabajar y ser futbolista profesional fue de 10,5M€ brutos por tres temporadas y media (más 50.000€ por cada partido con el primer equipo) por lo que su sueldo anual era más de diez veces el de la mayoría de sus compañeros del Castilla, que rondaban los 250.000€ anuales. "Martin no era mal chico, pero iba a su rollo y se veía que lo único que le interesaba era el primer equipo", comenta uno de los jugadores que compartió con él esa etapa castillista. "Sólo le veíamos en los partidos". Odegaard prefería jugar al tenis con su padre a socializar con los otros canteranos blancos. No se consideraba uno de ellos. Por contrato tenía una habitación en la residencia del primer equipo en Valdebebas. Contrato que luego fue renovado dos veces con mejoras.
Una lluvia de dinero para un jugador cuyo salario era superior al presupuesto de los clubes contra los que jugaba en Segunda B, que no le gustaba jugar en los campos de la categoría de bronce del fútbol español y que, pese a todo, deja plusvalía en las arcas blancas. Descontando el pago al Stromsgodset noruego más el sueldo del chico estos años, y teniendo en cuenta lo que pagaron Real Sociedad y Arsenal por las cesiones del noruego más lo abonado ahora por los gunners ahora en concepto de traspaso, el Madrid ha ganado incluso dinero. En torno a 21 millones de euros. La hoja de balances sale en positivo.
Condiciones estelares en el Emirates
Asuntos de economía a un lado, el Real Madrid ha terminado vendiendo casi por la puerta de atrás a una promesa tan del gusto de Florentino Pérez que incluso le molestaban las críticas mediáticas que recibía el noruego. Una eclosión en estrella madridista que finalmente no se ha producido y que está por ver si cristalizará en Londres. Allí, Odegaard gozará del estatus estelar que le reclamaba al Madrid y por el camino será muy bien pagado por ello. El Arsenal le subió el sueldo que tenía en Concha Espina para convencerlo de irse allí cedido los últimos seis meses de la temporada pasada. Aún no han trascendido las cifras de su acuerdo con el equipo cañonero hasta 2026, pero pasará a estar en los escalones de privilegio de la pirámide salarial en el Emirates.