Koba está bloqueado y busca cesión
El francés, a quien el Valencia renovó cuatro años como gran apuesta, no entra en los planes de Bordalás, pero la lesión de pretemporada y que no jugara casi el curso pasado le deja con pocas opciones.
Koba Koindredi fue una de las grandes apuestas de Pablo Longoria cuando en 2019 le incorporó a las filas che con apenas 17 años. Dicha apuesta la continuó la actual directiva cuando Longoria fue despedido, tanto es así que el pasado mes de junio la entidad del Turia le renovó hasta 2025 dejándole claro que era una de las piezas clave en el futuro del club y que haría la pretemporada con el primer equipo.
Todo pintaba de maravilla, pero la realidad de Koba es hoy muy compleja. Todo se torció cuando en el segundo día de entrenamiento una rotura de fibras apartó al francés de la pretemporada. El centrocampista tuvo que trabajar al margen y cuando se reincorporó estaba, evidentemente, retrasado en cuanto a físico se refiere. Poco a poco fue recuperando el tiempo perdido, sin embargo no pudo disputar minutos en los amistosos para poder lucir.
Y claro, la situación ha llegado al punto de que Bordalás prefiere que salga cedido. Primero porque ve a Hugo Guillamón por delante de él en la rotación y así se lo ha hecho saber al jugador y segundo porque cree que el futbolista aun debe dar un paso más en cuanto a físico se refiere. Al centrocampista se le busca cesión pese a que en la entidad de Mestalla no saben si llegará o no un centrocampista al final del mercado estival ni si Wass continuará en el club.
El problema radica en que Koba está bloqueado. Porque antes de concluir la campaña pasada, con su renovación ya encaminada, el jugador esperaba tener minutos en los duelos en los que el equipo ya estaba salvado y en los que se puso ganando por una diferencia de dos goles. Eso no ocurrió pese a que en el club le repetían que era una apuesta 'de club' y que estaban satisfechos por sus minutos jugados en el Wanda o en el Pizjuán en Copa. Y ahora con la llegada de Bordalás parece no tener hueco en el Valencia, que tampoco ha podido encontrarle equipo hasta la fecha.
Pero si algo tiene claro el futbolista es que no va a salir cedido a un proyecto que no le convenza o en el que no pueda ser importante. La ausencia de minutos sobre el verde sumado a las lesiones han propiciado que el mercado del francés esté reducido a día de hoy, porque los clubes prefieren incorporar jovenes en propiedad y no cedidos. Por ello una solución que parece coherente es que se quede en la entidad al menos hasta enero, siempre y cuando no aparezca un equipo óptimo.
Si se queda, quizás pueda asimilar más los conceptos de Bordalás (pese a que es el último en la rotación) y salir en enero cedido después de disputar los partidos de Copa, en los que entonces deberá mostrar cuan válido es para atraer clubes, aunque a día de hoy Bordalás prefiere que salga cedido. En cualquier caso, la última semana de mercado va a estar plagada de movimientos y ahí quizás pueda encontrar la ventana de un equipo que quiera sumarle a su causa.
Oportunidad Granada
Pese a todo, Koba tiene el próximo fin de semana una oportunidad. Con Guillamón sancionado y Racic que se le vio un tanto falto de ritmo el viernes pasado, todo apunta a que el francés estará en el banquillo en el Nuevo Los Cármenes. El transcurso del duelo definirá si Koindredi tiene la oportunidad de saltar al verde, pero con Guillamón fuera, el sábado puede tener una oportunidad para lucir.