Un Liverpool superior se impone en el homenaje a Robinson
Los británicos, sobre todo en la primera mitad, fueron un trueno ante Osasuna. Conmovedor minuto de aplausos con el 'Your never walk alone' de fondo de los 45.000 aficionados en Anfield.
Osasuna ha afrontado esta noche su partido más exigente y emotivo de pretemporada, ante el Liverpool. Los rojillos visitaban por primera vez en su historia Anfield y el motivo no podía ser mejor. 'Reds' y rojillos se medían para rendir homenaje al ex de ambos equipos, Michael Robinson. Lucían una camiseta de edición limitada, hecha especialmente para la ocasión, en color blanco y con una imagen del delantero inglés celebrando un gol con Osasuna.
La primera aproximación a la portería rival fue de los visitantes.Salieron con la defensa muy adelantada para tratar de evitar que los de Jurgen Klopp, que alineó al joven de 16 años, Gordon, encontraran huecos. Al Liverpool le costaba salir jugando la pelota. Pero despertó y un desajuste en el centro del campo rojillo le permitió adelantarse en el marcador, con gol de Minamino, al que le acompañó algo la fortuna ya que el balón pegó en Areso y nada pudo hacer Juan Pérez. Los ingleses imprimían un ritmo muy alto. Una gran jugada al primer toque acabó en el segundo gol que esta ocasión salía de las botas de Firmino. Osasuna se diluía, perdía demasiados balones y los ingleses llegaban con facilidad. Los de Arrasate no podían con la velocidad y la presión de los de Klopp. Juan Pérez, con una gran intervención, evitó una sangría. Sin embargo, no pudo impedir de Firmino firmara un doblete y estableciera el tres a cero, con el que llegaron al descanso.
En la segunda mitad, ambos entrenadores, sobre todo Arrasate, optaron por mover los banquillos. Osasuna quería frenar la velocidad y el juego vertical que los ingleses mostraron en la primera mitad y comenzaron presionando muy arriba. Sin embargo, como sucediera en la primera mitad, el seis veces campeón de Europa se hizo rápidamente con el dominio del juego y se exhibía con espectaculares detalles técnicos y un alto nivel. táctico y físico. A los navarros el balón les duraba muy poco. Los minutos pasaban y los rojillos no eran capaces de deshacerse de la presión de un Liverpool muy superior. Pese a ello, Osasuna no desistió y llegó la recompensa con un sensacional centro de Rubén García y un Kike García que de cabeza establecía el tres a uno. En los últimos minutos los rojillos lograron llegar más al área rival pero tuvieron que conformarse con el privilegio de haber jugado en Anfield.
La victoria se la llevó el Liverpool, pero lo importante era homenajear a Robinson, quien seguro, desde donde esté, disfrutó del partido con su eterna sonrisa dibujada en el rostro. Estaba reunida su familia por primera vez en Anfield. Emocionada como nunca.