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FRANCIA

Diez promesas a seguir en la Ligue 1

El campeonato francés echa a rodar mañana y hoy os presentamos a diez jóvenes talentos a los que seguir durante una temporada de muchas emociones.

Diez promesas a seguir en la Ligue 1

Tras la gran hazaña cosechada por el Lille en el mes de mayo, la Ligue 1 reabre sus puertas a partir de mañana con un Mónaco-Nantes. El gran favorito a llevarse el título sigue siendo el PSG, más si cabe tras el extraordinario mercado que ha hecho Nasser Al-Khelaïfi. En el siguiente artículo, os presentamos a diez promesas a las que echar el ojo esta temporada en uno de los campeonatos que más jugadores jóvenes exporta al resto de las grandes ligas europeas.

1. Rayan Cherki (2003-Olympique de Lyon)

El Olympique de Lyon se ha caracterizado durante la última década por ser uno de los equipos que mejor trabajan su cantera en Europa. La joya de la corona actualmente es Rayan Cherki, un talento franco-argelino que, a sus 17 años, ya ha sumado grandes actuaciones en la Ligue 1 y que está llamado a ser la próxima gran promesa del fútbol francés. Sin Rudi Garcia en el banquillo y con Petr Bosz, las posibilidades de ver al mediapunta esta temporada como titular aumentan bastante, más si cabe tras la salida de Memphis Depay al Barcelona.

Cherki es un jugador que dispone de un talento especial. Cada vez que entra en contacto con el balón, genera peligro y tiene una personalidad arrolladora para pedir el esférico sin importarle el contexto o la situación del partido. Con un fantástico dominio de las dos piernas y con una capacidad extraordinaria para salir airoso del regate, Cherki afronta una temporada decisiva para dar un paso al frente y para intentar liderar a un Lyon necesitado de talentos en su cantera ante las crisis económicas que está viviendo el equipo que preside Jean-Michel Aulas.

2. Jérémy Doku (2002-Rennes)

Con tan solo 18 años, Jérémy Doku se convirtió la temporada pasada en el fichaje más caro de la historia del Rennes. El conjunto bretón desembolsó 26 millones en una de las mayores promesas del fútbol europeo, que además realizó con Bélgica una más que notable actuación en la última Eurocopa. Perseguido por la sombra de Raphinha durante toda la primera vuelta en la Ligue 1 (traspasado al Leeds el último día de mercado), Doku se erigió como una de las grandes revelaciones del tramo final de la Ligue 1. Cambiarse de la banda derecha, en la que no podía nunca orientase para disparar, a la izquierda fue decisivo para que mejorara notablemente sus cifras y para que se bautizara como una pesadilla para la mayoría de sus rivales.

Doku se puede definir como un extremo que juega a la velocidad de la luz. Todas las acciones que ejecuta van a unas revoluciones que le permiten destrozar a sus oponentes en cambio de ritmo y que le hacen ser uno de los jugadores que mejor cambio de ritmo atesoran del fútbol europeo. Unas velocidades que, precisamente, le impiden ser certero en la última acción, ya que el internacional belga sufre mucho para producir en el último tercio del campo y es por ello por lo que no materializa todo lo que genera, que es abundante. Si consigue pulir esa toma de decisiones, algo que parece bastante probable en vistas de la edad y el potencial del jugador, estamos ante un jugador que puede marcar las diferencias durante una década en el fútbol europeo.

3. Maxence Caqueret (2000-Olympique de Lyon)

El fútbol francés se ha caracterizado últimamente por producir mediocentros físicos cuyo dominio de la técnica es limitado en líneas generales. Francia ganó el Mundial con un doble pivote formado por Pogba y Kanté (más la ayuda de Matuidi), por lo que es bastante extraño ver que surja un centrocampista en la Ligue 1 que brille por la técnica. Es el caso de Maxence Caqueret, un mediocentro que está dejando actuaciones de mucho nivel en el fútbol francés y que se ha convertido en el patrón del centro del campo del Olympique Lyon.

Caqueret es, probablemente, uno de los medios más completos que hay ahora mismo en la Ligue 1. Debutó con 18 años, se impuso al siempre fútbol físico de la Ligue 1 y con su dominio del espacio-tiempo ha conseguido ser indiscutible en uno de los mejores equipos de Francia. Siempre antes de recibir, Caqueret ya sabe cuántos jugadores tiene detrás, a dónde tiene que ir el balón y qué control va a ejecutar para salir de la presión. El control orientado para salir de la presión rival, unido a una inteligencia táctica suprema en el contrapressing (el mejor de Europa en cuanto a robos se refiere tras pérdida de balón), hacen del canterano del Lyon un mediocentro completísimo y con un potencial que le auguran un futuro extraordinario en el fútbol europeo.

4. Amine Gouiri (2000-OGC Niza)

Amine Gouiri ha roto todas las barreras posibles dentro del fútbol francés. El franco-argelino e internacional sub 21 con Francia puso rumbo al Niza la temporada pasada ante la falta de oportunidades por parte de Rudi Garcia en Lyon. En tiempo récord, el atacante se convirtió en el mejor jugador de su equipo y no solo eso, sino que decidió una gran cantidad de partidos por la enorme calidad que atesora. Ha sido comparado con Benzema por la similitud que tiene en las conducciones con el jugador del Real Madrid y la presente puede ser la temporada en la que explote definitivamente en la Ligue 1.

Gouiri es un talento diferente, extraordinario y singular. Eso se ve nada más que tiene el primer contacto con la pelota. Lleva betún en las botas y sus conducciones, que aúnan técnica y potencia, son casi imparables. Aunque se siente más cómodo jugando de delantero, la temporada pasada fue un puñal recibiendo a pierna cambiada en la banda izquierda, trazando la diagonal hacia dentro que tanto le caracteriza para combinar y sumando 12 goles y 7 asistencias en la primera temporada que tuvo como profesional. Sin duda, hay que ir paso a paso con Gouiri, pero estamos ante un jugador que tiene unas condiciones idóneas para marcar las diferencias en Europa a corto plazo. El Niza se encomienda a su calidad para soñar con una hipotética clasificación a la Champions League.

5. William Saliba (2001-Olympique de Marsella)

Hace dos años, William Saliba se convertía en la venta más cara del Saint-Étienne con 18 años (superado un año después por Wesley Fofana). El central firmaba con el Arsenal para liderar la siempre cuestionada defensa Gunner, pero la negativa de Arteta a darle minutos, alegando que es un fichaje que hizo la directiva y no el técnico, le han impedido hasta la fecha debutar tan siquiera con el conjunto inglés. Acumuló dos cesiones en Saint-Étienne y Niza respectivamente y la sensación es que nunca volvió al espectacular nivel que atesoró en el Loira hace tres temporadas. Ahora, buscará recuperar sensaciones con Sampaoli en un Olympique de Marsella que ha sido, sin duda alguna, el gran agitador del mercado en Francia.

Saliba tan solo tiene 20 años y sigue siendo uno de los centrales con más proyección del fútbol francés. Desde que Varane irrumpiera con 18 años en Lens, ningun defensa había mostrado tal superioridad en un equipo a dicha edad y es por ello que el OM ha decidido ficharle para que lidere la defensa del conjunto marsellés. Si consigue Sampaoli recuperarle, estamos ante uno de los defensas franceses con mayor proyección con permiso de Jules Koundé y que podría darle el billete de vuelta al Arsenal para brillar en la Premier League. Limpio al corte, rápido a campo abierto y con una conducción que bate líneas en salida de balón, Saliba está ante la oportunidad de su vida para relanzar una carrera que, visto lo visto en Saint-Étienne, debería estar plagada de éxitos.

6. Loïc Badé (2000-Rennes)

Loïc Badé ha sido uno de los grandes traspasos del verano en la Ligue 1. El central de 21 años fue vendido al Rennes por 17 millones de € con el objetivo de liderar la defensa de uno de los equipos con más aspiraciones del fútbol francés. Llegó gratis hace un año al Lens procedente del Le Havre, destrozó todos los registros en su primera temporada en la Ligue 1 y estuvo a punto de clasificarse a Europa con el Lens, recién ascendido el curso pasado y revelación de la temporada en parte por el fantástico rendimiento de Bade en defensa.

La 2021/2022 debe ser la de la confirmación del joven central. Desde que Raphäel Varane irrumpiera con 18 años en la élite, el Lens no había tenido nunca un defensa con la contundencia y el liderazgo de Badé. Con una salida pulcra de balón, capaz de batir líneas con su gran pase vertical o su capacidad para conducir, Badé es un defensa que destaca sobre todo por su lectura de juego. Casi siempre llega al corte por su intuición y evita el choque para salir airoso de la mayoría de los duelos. Ahora, llega a un Rennes necesitado de solidez defensiva y nadie mejor que el canterano del Le Havre para revertir los problemas que ha tenido atrás el conjunto bretón.

7. Calvin Stengs (1998-OGC Niza)

Sin duda, uno de los grandes fichajes de la temporada en la Ligue 1 ha sido el de Calvin Stengs por el Niza. El internacional sub 21 con Países Bajos tuvo una explosión fulgurante en la Eredivisie, pero una lesión ralentizó su progresión, a tal punto de no haber realizado una última temporada muy productiva en relación con su potencial. Sin embargo, el Niza, proyecto liderado por Ineos, ha decidido ficharle para que relance su carrera y para que lidere en ataque uno de los equipos con más aspiraciones actualmente del fútbol francés.

La zurda de Calvin Stengs puede maravillar esta temporada en la Ligue 1. Es un jugador que atesora mucha calidad, que marca los tiempos de maravilla y al que le gusta empezar en la banda derecha para después trazar la diagonal hacia dentro y perfilarse para, por una parte, buscar el disparo desde meda distancia o, por el contrario, un último pase para dejar al delantero en una situación clara de gol. Fue uno de los mejores jugadores del pasado Europeo sub 21 y la Ligue 1, competición en la que suelen brillar extremos habilidosos y que dominen la técnica en transición, le viene como anillo al dedo al exjugador del AZ Alkmaar.

8. Lucas Gourna-Douath (2003-Saint-Étienne)

En medio de una crisis económica y deportiva sin precedentes en el Saint-Étenne, la cantera se ha afianzado como el principal apaciguador de una situación muy delicada en el sureste de Francia. Uno de los jugadores que más ha destacado ha sido Lucas Gourna-Douath, un centrocampista con un físico imponente que, la temporada pasada, se dio a conocer por realizar un partido muy completo ante el PSG, a tal punto de ser comparado con Pogba debido a su facilidad para batir líneas en conducción por su físico y a su gran talento para salir de la presión aprovechando la gran envergadura que atesora.

Durante el verano, ha habido muchos rumores que han situado a Gourna-Douath en la órbita de grandes equipos del fútbol europeo. Clubes como Atalanta, Dortmund o incluso la Premier League han intentado birlarle al Saint-Étienne a una de las joyas de la corona de su prestigiosa cantera. Sin embargo, el jugador ha mostrado una madurez impropia de alguien de su edad y ha ampliado su vinculación a Les Verts por cuatro temporadas. Una temporada en la que, salvo sorpresa, Gourna-Douath será indiscutible en el centro del campo del Saint-Étienne y en la que puede convertirse en uno de los mediocentros jóvenes con más futuro del fútbol europeo.

9. Sofiane Diop (2000-AS Mónaco)

Es difícil ser canterano del Mónaco y asentarse en el equipo. Durante las últimas temporadas, el conjunto monegasco se ha caracterizado por realizar inversiones millonarias antes que apostar por la fructífera cantera del club. Sofiane Diop (que es canterano pese a haberse formado mayoritariamente en Rennes) así como en su día Mbappé o Badiashile en defensa, es una de las pocas excepciones que han roto la filosofía seguida por el equipo del Principado desde la llegada de Ryboloblev. Hablamos de un jugador con un talento abrumador, capaz de marcar las diferencias tanto en banda como por dentro y que se ganó la confianza de Kovac la temporada pasada.

Diop es un jugador diferencial en campo rival. Suele empezar el partido pegado a la banda, pero sus movimientos hacia dentro, castigando la espalda del mediocentro rival, unido a una calidad sobresaliente para realizar controles orientados o para cambiar de ritmo, le hicieron ser una de las grandes revelaciones de un Mónaco que acabó peleando por la Ligue 1 hasta las últimas jornadas. Si las lesiones le respetan, estamos ante un talento en bruto que puede aspirar en pocos años a ser uno de los mejores jugadores de la Ligue 1.

10. Pape Matar Sarr (2002-Metz)

El Metz se ha convertido en un ejemplo para el fútbol europeo en su gestión de jugadores con la Generation Foot. Este equipo de Senegal firmó un convenio hace años con los granates para que tuvieran preferencia a la hora de fichar talentos de sus equipos a cambio de una importante inversión en infraestructuras. Prueba de ello son los Sadio Mané, Ismaïla Sarr, Diafra Sakho, Ibrahima Niané, Habib Diallo o Pape Matar Sarr, un mediocentro de 19 años que tuvo una irrupción fulgurante la temporada pasada en el noreste de Francia.

Pape Matar Sarr es un centrocampista bastante completo y que puede desempeñarse en varias zonas de la divisoria. Por una parte, posee la calidad necesaria para ser diferencial en salida de balón, combinando la velocidad en conducción con su cuerpo para aguantar bien la pelota. Por otra, el dinamismo que atesora también le permite jugar como interior, además de tener una llegada en segunda línea muy productiva gracias a su gran lectura e interpretación de las jugadas. Con un potente disparo desde media distancia y siendo un jugador que domina por el físico los partidos, Sarr, que ha tenido ofertas de la Premier, pero finalmente seguirá en Metz, buscará en su segundo año en la Ligue 1 mejorar el sensacional rendimiento que mostró en el que fue su primer curso en el fútbol francés.