Ceballos tiene sitio
El centrocampista quiere quedarse en el Madrid: una buena actuación suya en los JJ OO de Tokio le abrirían las puertas a un regreso a la disciplina madridista. Ante Japón estuvo notable
“Hay que saber lo que el entrenador (Carlo Ancelotti) quiere y hay que ser objetivos. Pero mi intención es jugar el año que viene en el Real Madrid. Siempre he querido hacer cosas importantes en este club y voy a pelear por ello”. Así se expresaba Dani Ceballos (24 años) días atrás en una entrevista concedida al Diario AS. Y si lo hace como lo hizo en el amistoso que la Selección olímpica disputó ante Japón, buena parte del recorrido ya está hecho. El sevillano fue una de las mejores bazas de los de Luis de la Fuente ante la selección japonesa, acompañando a Mikel Merino y a Zubimendi en el centro del campo. No le pesó en ningún momento asumir la responsabilidad de generar juego, enlazar con el ataque, moverse y distribuir juego. Y precisamente, Ancelotti, centrocampista de recorrido en su época del Milan, conoce al dedillo las condiciones de un jugador del centro del campo. Su gran maestro, su entrenador sueco en el Roma, Nils Liedholm, se las supo potenciar de tal manera que acabó siendo una de las piezas clave del Milan de Sacchi.
Ceballos fichó por el Real Madrid en julio de 2017: los blancos pagaron cerca de 17 millones de euros por su traspaso. Entonces ya era una figura reconocida en las filas del Betis y se había proclamado MVP del Campeonato de Europa Sub-21. Estaba llamado a ser una de las figuras del fútbol español. Sin embargo, su paso por el Madrid no ha sido, hasta el momento, nada brillante, aunque ha dejado muestras de su talento: ha marcado cinco goles en 56 encuentros (entre todas las competiciones), destacando un golazo de falta ante el Betis en el estadio Benito Villamarín y un doblete ante el Alavés en Mendizorroza.
Tras dos años jugando cedido en el Arsenal, el nuevo Ceballos es un jugador mucho más físico, con más presencia, y que tiene claro que vuelve para quedarse. Hace unos días, el Milan preguntaba tanto por él como por Brahim para fortalecer su plantilla. Al utrerano lo quiere para suplir el rol de Çalhanoglu, que ha cruzado de acera para irse a jugar al Inter. Pero Ceballos no quiere más cesiones. Alcanza los 25 años de edad el próximo 7 de agosto, fecha que coincide con la final de fútbol de los Juegos Olímpicos, y quiere un equipo donde asentarse, donde convertirse en pieza importante. El centro del campo blanco lo van a seguir conformando Modric, Casemiro y Kroos, pero la directiva blanca no quiere que le ocurra lo mismo que la pasada campaña, en la que ninguno tuvo un recambio claro y de garantías tras la salida de Odegaard (con el que coincidió en el Arsenal), y tuvieron que tirar de canteranos del Castilla como Antonio Blanco o Arribas. Por eso, y tras una charla pendiente que tiene con Ancelotti decidirá su futuro, que podría ser buscar un traspaso. Pretendientes no le faltan…
Con contrato hasta 2023 (firmó por seis temporadas en 2017), Ceballos sabe que está ante una oportunidad que no puede dejar escapar. Tras una buena campaña en las filas del Arsenal, una buena actuación en los Juegos Olímpicos haría que su figura se elevara. El propio Ancelotti lo quiso llevar al Nápoles cuando supo del interés del Madrid en buscarle un acomodo donde pudiese perfilar todas sus cualidades. Ahora lo va a tener bajo su disciplina… si quiere. Pero con partidos como el que realizó ante Japón, gran parte del camino ya está recorrido. Con continuidad y confianza los jugadores se ganan un puesto. Pero Ceballos llega para quedarse...