De Paul, un refuerzo a medida para el esquema de Simeone
El argentino aúna calidad y trabajo colectivo. Su final de la Copa América contra Brasil le define. Puede encajar perfectamente en el doble pivote o en el 1-5-3-2.
Si alguien no ha visto jugar a Rodrigo de Paul, la final de la Copa América puede ser su mejor hoja de servicios y un currículum ideal para presentarse. El centrocampista argentino fue clave para que Argentina se llevase el título de Maracaná ante Brasil y dejó una actuación brillante tanto en el trabajo defensivo como con su aportación de cara a la meta rival, asistiendo a Di María en el único gol del partido y dejando un pase de oro para Messi en el minuto 88 que a punto estuvo de convertir en la sentencia del encuentro.
El Atlético fue el más rápido, Andrea Berta y Simeone quedaron impresionados por su temporada en Udinese y esta vez el club no quiso andarse por las ramas y cerró su incorporación antes del inicio de la Copa América. Estaban avisados de lo que podía suceder, un torneo del que De Paul ha salido totalmente revalorizado. Sin embargo, su progresión viene de lejos. El argentino ya jugó en LaLiga, en el Valencia entre verano de 2014 y enero de 2016. Por entonces muy joven, destacaba como un futbolista de banda regateador, con buen desborde y llegada, pero poco atento en defensa y con escasa regularidad.
Pero en el Udinese llegó su reconversión. Comenzó a jugar más cerca al centro del campo, a ser clave en el inicio de la jugada, fue madurando y concienciándose de la importancia de trabajar por el equipo. Y, cinco temporadas después, se marcha como un referente en su club al que acabó capitaneando y como uno de los grandes nombres de la Serie A. A sus 27 años, pasa por el mejor momento de su carrera y puede adaptarse como un guante a los esquemas de Simeone. Un llegador excelente, con mucho carácter y cada vez mejor física y tácticamente.
Sus datos hablan por sí solos. Acabó el curso con nueve goles y nueve asistencias (más una en copa) partiendo como mediocentro. Experto también a balón parado, Con 72 centros al área buenos, el argentino acabó como el tercer mejor jugador en esa faceta en la liga italiana. Es capaz de superar muchas veces las líneas del centro del campo a través de la conducción y el regate. Tanto es así que acabó como el futbolista con más regates buenos de la Serie A, con 122. De Paul fue el futbolista de la liga italiana con más duelos ganados, con 294 (le sigue Belotti con 292), y el décimo centrocampista con más recuperaciones con 207. Además, también destaca en el pase (1.465 envíos buenos con un 79,79% de acierto).
Posicionalmente encaja perfectamente en los dos esquemas más utilizados por Simeone. Tanto en un doble pivote, como brilló con Argentina en muchos minutos junto a un futbolista más defensivo a su lado, como en ese centro del campo con tres elementos que potenció el Cholo el curso pasado (con Koke-Llorente y Lemar como sistema más habitual). Físicamente capaz de llegar de área a área durante todo el partido, quizás el puesto ideal para De Paul sea el que este año tanto explotó Llorente, perfilado a la derecha y con libertad para caer a banda y pisar el área rival. Su pasado como interior también le permite volver al costado cuando el Cholo lo necesite.
Un fichaje que llega en su mejor momento y que ha conquistado a los atléticos con su papel en la selección. Infatigable ante Brasil, su despliegue físico fue encomiable, encargado de medirse a Neymar, frenar a Paquetá y poner en problemas a Casemiro. Después de todo el partido corriendo, fue protagonista también en el área rival en el final del partido dejando claro que es incansable y Scaloni no le retiró pese a que estaba amonestado. Todavía falta un tiempo para poder verle de rojiblanco, ya que al igual que Correa, Lodi y Trippier, acaba de comenzar sus vacaciones. Pero, las características de De Paul se adaptan de maravilla a las del Atleti de Simeone. El argentino aumenta aún más la competencia interna del campeón de Liga.