Otávio, nuevo Wijnaldum para Klopp
El técnico alemán ha pedido expresamente el fichaje del brasileño, centrocampista ofensivo del Oporto, para ocupar el lugar dejado por el holandés.
La salida de Wijnaldum del Liverpool ha sido traumática para un Jürgen Klopp que en todo momento quiso seguir contando con el centrocampista. Sin embargo, toca rehacerse. Para ello, el alemán ha pedido, según 'A Bola', el fichaje de Otávio, centrocampista ofensivo del Oporto que es indiscutible para Sergio Conceiçao. De hecho, el medio portugués añade que incorporación podría ser "inminente", teniendo en cuenta la situación contractual del brasileño.
Otávio, que llegó a los Dragones en 2014 procedente de Internacional, se ha convertido, a sus 26 años, en uno de los futbolistas más importantes de la entidad y por ello firmó en marzo una renovación hasta 2025. En ella aparece un condicionante aceleraría la operación, siempre según 'A Bola', y es que, a partir del 1 de julio su cláusula de rescisión pasa de los 40 millones de euros actuales a 60. Un incremento de 20 millones que no es baladí y menos en los tiempos de estrechez económica que vive el fútbol actual.
Klopp, el gran valedor
Las negociaciones entre ambas partes ya existen y, si bien ya avanzábamos que el de João Pessoa es clave (ha jugado 42 partidos esta temporada, con 5 goles y 12 asistencias), el Oporto no vería con malos ojos la operación, puesto que supondría una inyección económica muy importante para las arcas del club. El citado medio indica que Klopp es un enamorado del juego de Otávio, hecho que, unido a la buena relación entre clubes desde la cesión de Marko Grujic, ha colocado al brasileño portugués (tiene doble nacionalidad) cerca de Anfield.
Neuhaus o Tielemans habían aparecido en el horizonte red, pero ahora parece que el de los Dragones toma la delantera. Los otros nombres deslizados guardaban mayores similitudes con Wijnaldum en lo que a juego respecta, puesto que responden a un perfil mucho más físico que un Otávio que puede desempeñarse también en banda, pero quizá sea esa polivalencia la que atraiga tanto a Klopp, un enamorado de la intensidad y la permuta de posiciones.