La primera etapa del duelo
Retoma el Espanyol Femenino la competición, este sábado ante el Madrid CFF, tras consumar el descenso, y apela al escudo, al orgullo y a construir el retorno a Primera.
Puede tratarse de la negación, como en el duelo convencional. O, simplemente, de la necesidad de sacar el orgullo, lo único que queda cuando no queda nada. Descendido la pasada jornada, hace dos semanas, ha tenido tiempo el Espanyol Femenino para digerir una situación histórica, la de su concurso la próxima temporada en Reto Iberdrola, pero todavía le restan dos jornadas en Primera, empezando por la de este mismo sábado ante el Madrid CFF en la Ciudad Deportiva Dani Jarque (11:00 horas), y con público. Un calvario.
“Entendemos la decepción de la afición, nosotros nos centramos en competir al máximo”, justifica en declaraciones a los medios del club Rubén Casado, el todavía entrenador. Más visceral se muestra la jugadora Cristina Baudet: “Sabemos que es una situación complicada, pero ya no queda otra que darlo todo por este escudo, por este club, y seguir luchando hasta el final, que creo que son nuestros valores”. “Lo tenemos que dar todo para empezar el camino de vuelta a Primera. Yo quiero seguir y subir al equipo. Estamos trabajando para ello”, rubrica.
No en vano, concede Casado, que salvo en algún entrenamiento de la semana pasada, nada más materializarse el descenso, “las jugadoras están siendo muy profesionales, veo el ánimo de salir a ganar, tengo la sensación de que podemos lograrlo”. “La imagen será importantísima, que vean que salimos a ganar, y sacar por respeto el máximo de puntos posible”, anima el técnico. Y rubrica Baudet: “Merecemos acabar con buenas sensaciones a pesar de lo que ha ocurrido”.