¿Por qué todo el mundo adora a N'Golo Kanté?
El francés es un tipo muy querido en su selección y su equipo. Su carácter, además de su calidad, le convierten en un futbolista adorado por compañeros y aficionados.
Cuando el cántico sobre N'Golo Kanté se popularizó en Francia después de la victoria del Mundial, uno en el que le alaban por su humildad y su cualidad para parar a Messi en las eliminatorias del Mundial, el centrocampista del Chelsea se quitó mérito. "No no, lo hicimos todos como equipo", aseguró.
Para otros sería una declaración para quedar bien sin más, con N'Golo es una muestra más de su carácter humilde que le hace ser uno de los futbolistas más populares del mundo. Un tipo que es distinto por ser más 'normal' que la mayoría de sus compañeros. Este relato se ha construido durante los años a través de gestos públicos y obliga a buscar motivos. ¿Por qué todo el mundo adora a Kanté?
El francés saltó a la primera línea del fútbol mundial siendo el mejor jugador del Leicester que se alzó campeón de Inglaterra en la 15/16. Kanté era capaz de cubrir todo el campo con carreras, buen hacer táctico y un físico prodigioso en fuerza para la disputa a pesar de su corto 1,68 de altura. Un destructor élite de bolsillo.
Ese salto le hizo ser más conocido a nivel mediático y ser adorado por su carácter humilde y sencillo, que volvió a demostrar este sábado cuando se coronó campeón de Europa y mejor jugador de la final. En los micrófonos de Virgin, en un gesto más de humildad, abogó todo el rato por el 'nosotros'. "Estamos muy felices. Es el resultado de mucho esfuerzo conjunto. Hubo buenos y malos resultados, pero permanecimos unidos. Jugamos muy bien en la segunda parte de la temporada y tenemos que disfrutar esto juntos. Lo importante es que nos mantuvimos unidos. Al final, lo bonito de ganar este tipo de títulos es hacerlo juntos", afirmó. Un ejemplo más.
Un feliz 'obrero' del fútbol
Kanté es un currante sobre el verde porque considera que tiene "el mejor trabajo del mundo". Él lo disfrutaba, pero cuando jugaba aún en divisiones inferiores se apañó un método alternativo de vida y estudió para contable, título que obtuvo.
Ahora, gestiona su dinero con sabiduría. A pesar de ganar aproximadamente nueve millones de euros anuales, N'Golo Kanté no es amigo de las extravagancias. El francés adora su Mini Cooper, que tiene desde que llegó a Inglaterra, y con él se marchó del Bridge causando sensación entre los aficionados que esperaban a la salida después de eliminar al Real Madrid. Ni rastro de superdeportivos... pero tampoco siquiera de un Mini nuevo. Ese mismo coche lo estrelló años atrás cuando iba camino del estadio para enfrentarse al Arsenal. Ese día apareció sin parte de la chapa cercana a la rueda y con el retrovisor izquierdo descolgado. Aquel miércoles se fue sin más problema, con el bullicio de la afición que allí le esperaba y con un accesorio extra: el premio a jugador del partido.
Según asegura, le costó adaptarse a conducir por la izquierda y en Leicester llegó a pedir en varias ocasiones ir corriendo a entrenar. Como si ahora fuera contable y fuera corriendo a la oficina. Desde el club se lo denegaron, así que disfrutó de su amado Mini, que no cambia por otro coche.
Si algo caracteriza a Kanté es su sonrisa y su afabilidad. Siempre una cara amable, siempre un detalle con todos... Según recogen medios ingleses, Kanté apareció en una boda de un aficionado del Chelsea por sorpresa (fue invitado y rechazó la invitación en principio) y estuvo atendiendo a todos los invitados de una boda que quisieron hacerse un selfie con él disfrutando de un evento tan especial con gente que apenas conocía. Incluso, a irse con total normalidad a casa de un fan del Arsenal que le invitó a cenar tras coincidir orando en una mezquita. A otro, según narró el mismo afectado en redes sociales, le pidió perdón por ganar el derbi contra el Arsenal y darle la tarde después de hacerse una foto con él.
Un tipo que cedió la Copa del Mundo en el día más importante de su carrera. Siempre esforzado por sus compañeros, humilde y alegre. El favorito de los aficionados y también, de la gente del fútbol, que le coronó como mejor jugador de la Liga desde la asociación de jugadores en su primer año en el Chelsea.
Las trampas de Kanté
Pero no es oro todo lo que reluce. Kanté también tiene sus travesuras. El francés es un tipo que tiene su picardía dentro y fuera del verde. Aficionado al UNO, sus compañeros de selección le tienen calado por hacer trampas y también ha llegado a dejar partidos de FIFA mientras era goleado. Un 'rage quit' de uno de los jugadores más deseados en el juego por todos.
Kanté es carisma y nadie parece tener malas palabras para él a pesar de que dentro del campo esté en un puesto poco agradecido para ser un tipo majo como es el de centrocampista defensivo. "Estaba en todas partes. Recibías, pensabas que tenías tiempo pero ya le tenías encima mordiéndote los tobillos. Me daba dolores de cabeza", reconocía Ayoze Pérez, jugador del Leicester en AS. Un tipo capaz de 'morder tobillos', pedir perdón y esbozar una sonrisa. De los pocos que puede decir en 2021 que apenas tiene haters. Todo el mundo ama a Kanté.