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Leganés LEG
5
Kevin Bua 14',Juan Muñoz 28', 42',Rubén Pardo 47',Miguel De La Fuente 54'
Finalizado

ZARAGOZA 0 - LEGANÉS 5

Leganés, un tornado de Primera

Los pepineros logran su mayor goleada en Segunda para consolidar su tercera posición y jugar el playoff de ascenso como serio candidato. Jugará ante el Rayo. Bochorno del Zaragoza.

Actualizado a

El Leganés es apisonadora. Ya lo era antes de aterrizar en La Romareda, claro que en las siete jornadas precedentes, ésas que acumulaban los de Garitano sin perder (ahora son ocho) había ejercido su potencial con formas toscas y rudas. Tan bellas como ver aplanar alquitrán sobre el asfalto una noche de verano. Ese blindaje era la principal virtud de una escuadra que, sin la presión para clasificarse para el playoff, mutó de tractor a cohete para cerrar su mayor goleada en Segunda División tras 572 partidos disputados. Puñetazo en la mesa cocinado en sólo 28 minutos, los que distaron desde su primer gol al Zaragoza (Bua, 15’) al 0-3 con el que Juan Muñoz cerró un primer acto (43’) de revolución en las sombras.

Ahí habitan normalmente los cinco cambios que Garitano introdujo en la alineación. Pero amparados por los focos de la titularidad, todos se lucieron. Especialmente el propio Juan Muñoz, autor también del 0-2 (golazo de falta en el 29’) y de un lanzamiento al palo tras otra falta que pudo suponer el tanto de la jornada contra un rival navegante en la inopia. Los maños fueron la nada. Rubén Pardo y Miguel completaron el 0-5. Con este triunfo, el Leganés se asegura la tercera plaza y jugará la primera ronda del playoff contra el Rayo desde el próximo jueves en Vallecas.

Repaso inaugural

Gusta el Leganés de iniciar sus partidos con narcótica fealdad. Nada es bello en ese blindaje permanente que, sin embargo, ha disparado su potencial defensivo para desactivar a los contrarios. Eficacia ‘Garitaniana’. La fórmula funciona. Pero en la revolución pepinera de La Romareda (rotaciones pensando en el playoff) el de Bergara desenfundó sus violines y regó de pegada todo su once. Sinfonía inusitada que cerró el primer acto con un insólito 0-3 (sólo lo había conseguido en la tercera jornada, ante el Cartagena), pese a que los primeros diez minutos fueron de emboscada blanquilla.

La gasolina del orgullo del duró al Zaragoza lo que su defensa tardó en pifiarla para dejar a Miguel solo en el balcón del área. El ariete le regaló a Bua el 0-1 (15’). Comenzaba el concierto de los meritorios blanquiazules. Pocos tan eclipsados como este extremo de raíces gallegas, pero pasaporte suizo. Ex del Basilea, no jugaba de titular desde el 21 de febrero y pese a que su ratio minutos-goles era, antes del duelo, de un tanto cada 189 minutos, Garitano lo había orillado a la oscuridad del banquillo (casi) permanente. Apenas vio la luz, ametralló su fusil y aún pudo hacer doblete si Ratón no le hubiera sacado otro mano a mano (39’).

La bella brutalidad de Juan Muñoz

Antes Juan Muñoz ya había encarrilado el duelo con un golazo de falta que no celebró por su pasado maño. Su cuarto gol de la temporada (primero de tiro libre) trasladó la tormenta que mojaba la Romareda a una pradera de falso color verde. Allí sólo mandaba el negro pepinero. Insaciable voracidad que el propio Juan Muñoz encarnó mejor que ningún otro. En el 35’ mandó al palo otra falta más escorada y en el 43’ anotó el 0-3 en una cucharita cargada de caviar. El recital madrileño era imparable ante un rival anodino. Acero machacando plastelina.

Un recital perpetuo que prolongó Pardo apenas 120 segundos después de la reanudación. El riojano fue uno de los cambios pepineros al descanso, que en lo sencillo de su triunfo, se permitió el lujo de reservar titulares y dar minutos a los lesionados. El 0-4 fue de sencillez vergonzante. El Zaragoza convertido en un naufragio desolador.

El 0-5 fue un martillazo. Miguel implosionó la pelota en la escuadra antes de que lo suplieran Borja Bastón, novedad tras un mes de baja. También volvió Miquel, ausente desde marzo, y Gaku, tocado desde hace semana y media. Un vendaval de buenas zarandeando al Leganés que hicieron de la segunda parte, los minutos de la basura más largos de la historia. Ahí, en la historia, quiere habitar un Lega que jugará por primera vez un playoff de ascenso para el que ha presentado candidatura con sorprendente brutalidad.