El compromiso con Bordalás: central, pivote y delantero
El Valencia consensuará con el técnico alicantino la selección de refuerzos, un plan que tiene luz verde por parte de Peter Lim.
El Valencia realizará tres incorporaciones para el proyecto de José Bordalás. Uno por por línea. El compromiso con el entrenador alicantino incluye un central, un mediocentro y un delantero. No es ninguna petición expresa de Bordalás. Es el plan que tenía el club para cualquier entrenador que llegara. Dicho plan se le presentó a Peter Lim a la vez que el nombre de Bordalás y el dueño dio luz verde a todo.
"Se necesitan incorporar en puestos específicos algunos jugadores, que le den un salto de calidad, de mayor nivel", comentó Bordalás en su presentación. Ahora el alicantino consensuará con Miguel Ángel Corona el perfil de los refuerzos. De momento el Valencia ha entablado conversaciones con viejas aspiraciones como Germán Pezzella o Yangel Herrera y un ex como Rafa Mir (aunque este tiene otras propuestas más tentadoras).
El Valencia ya realizó en enero un refuerzo por línea. Llegaron Ferro, Oliva y Cutrone. Pero se hizo sin consenso con Javi Gracia, un técnico que rehusó participar en la planificación tras el vacío que le hicieron en verano. Sea por ello o por el rendimiento de los tres jugadores llegados en calidad de cedidos, su aportación al colectivo fue testimonial. El que más participó fue Oliva con solo 191 minutos (Ferro, 181 y Cutrone, 100).
Bordalás también sabe que habrá salidas. Y ahí el mercado dirá. El Valencia tiene que hacer ventas para equilibrar presupuesto (por unos 30M€). AS ya informó que la idea de Lim era traspasar a Guedes, además de liberarse de la ficha de Cillessen y escuchará ofertas por Maxi Gómez. Peter Lim augura un mercado de puño cerrado y ello tiene varias lecturas.
El dueño no tiene intención de malvender este verano a los que considera sus principales referentes, como son José Luis Gayà y Carlos Soler. Pero a su vez, el Valencia, por su situación económica, salvo que reciba un respaldo de la propiedad en forma de inyección económica (empezando por prorrogar el pago de los 54,5 millones prestados por Lim, cuya devolución reclamó que fuera a corto plazo), el club no está en condiciones de ponerle el cartel de intransferible a ninguno de sus jugadores.