COPA DE LA REINA IBERDROLA | BARÇA 4-2 LEVANTE
Triple corona para el Barça
Marcaron Guijarro, Alexia (2) y Torrejón. Martens dio tres asistencias. Las azulgranas dominan la Copa con su octavo trofeo y culminan su soñado triplete.
Intratable. Nadie puede parar a este Barça, que se ha abonado a la historia para ser legendario. Ante el Levante volvió a brillar con otra gran gesta, la que le lleva directo a un épico triplete de Liga, Copa y Champions. Y lo hizo con determinación y con ese ADN azulgrana que desborda y hace enorgullecer a la hinchada culé, dejando en el lado opuesto a un rival que suma galones pese a la derrota. Resistió el equipo granota, pero para tumbar a este Barça hace falta mucho más que talento y ganas en una gran segunda parte.
El Barça saltó al campo con las ideas muy claras. Y pronto encontró a una de sus grandes estrellas del partido: Lieke Martens. La neerlandesa se vistió de guante para dejar el partido con 3-0 antes de cumplirse la media hora de partido. Primero, puso un centro desde el córner derecho que remató con la testa Patri Guijarro a los cinco minutos del pitido inicial. Y, un cuarto de hora después, repitió asistencia medida desde el costado zurdo para que Alexia Putellas sumara el segundo al marcador.
Quería más Martens y el Barça. Esta vez su socia elegida fue Marta Torrejón. La reina de Copas (sumó en esta final su novena, tras ganar cinco con el Barça y cuatro con el Espanyol) no faltó a la fiesta del gol y aprovechó una gran asistencia de la neerlandesa para poner el 3-0 antes de marcharse el encuentro al descanso. Quedaría tiempo para más y no serían goles.
El Levante no quería morir tan pronto y dejó falsos reflejos de esperanza en el tramo final de la primera parte. Con una superioridad aplastante del Barça, el equipo valenciano no bajó los brazos, pero acusó falta de fuerzas físicas y mentales para hacer frente a tal vendaval. Y ello lo demostró en dos ocasiones falladas de Toletti y una muy, muy clara de Alba Redondo, que erró el remate a boca de gol.
Una final distinta en la segunda parte
No entraron estas internadas de las valencianas y el luminoso se quedó inmóvil con un Barça que dejaba la sensación de haber rebajado su intensidad con el privilegio de poder relajarse en una final de Copa. Así es este equipo, que repitió el planteamiento en el segundo tiempo. Con el público volcado, en medio de cánticos y celebraciones que se adelantaron al pitido final, el Barça empezó mareando el partido a su antojo, con sendas ocasiones que no logró matar en la portería de una María Valenzuela desbordada.
Pero, esta vez sí, el Levante sacó su garra con efectividad. De los fallos del Barça de cara a puerta a un equipo granota que puso contra las cuerdas a las azulgranas. Las de Pry aprovecharon un error y mal entendimiento de Pereira y Cata Coll para que Alba Redondo hiciera el primero. Un 3-1 que parecía indoloro hasta que una gran jugada colectiva del Levante devolvió la emoción a la final, con otro gol, esta vez de Banini.
Alexia Putellas, con un doblete decisivo
La argentina aprovechó el rechace a un disparo de Esther dentro del área que salvó Pereira bajo palos. Con su diana, la ilusión se encendió para las valencianas, pero ahí estaba Alexia Putellas para apagarla. La capitana del Barça se echó a su equipo a las espaldas y acabó con las dudas en una mala salida de balón del Levante.
Fue decisiva la intervención y gol de la de Mollet del Vallès, nombrada MVP del partido, para salvar al Barça en una final que murió entre ocasiones de uno y otro equipo. Jenni Hermoso, Crnogorcevic, con un tiro al palo, y Esther fueron las protagonistas de las internadas de mayor peligro de ambos bandos en los minutos finales. En ellos, la tensión se podía cortar con cuchillo, con un Levante que sacó fuerzas de donde no las hay y un Barcelona que supo resistir con un buen juego, sin sufrimiento final.