El Espanyol agradece en Barcelona su curso celestial
El club, con cuerpo técnico y jugadores a la cabeza, ha querido visitar la Basílica de la Mercè porque es una "tradición" y para celebrar el ascenso a Primera.
El Espanyol, con el cuerpo técnico y la plantilla a la cabeza, ha visitado este mediodía la Basílica de la Mercè, como ocurriera en 1963 después del primer ascenso, para ofrecerle a la patrona de la ciudad de Barcelona el ascenso a Primera División después de una temporada que se podría considerar como celestial para los blanquiazules. Un acto en el que también ha participado el consejero delegado, Josep Maria Durán, que le ha hecho entrega de una camiseta al padre Fermín Delgado, maestro de ceremonias.
"El Espanyol siempre ha presumido de ser un club deportivo, honrado y bondadoso", comentó el padre después del presente de la entidad blanquiazul, que como recordó Durán está arraigada a Barcelona. "Es una muestra de agradicimiento, siguiendo una tradición. Nacimos en esta ciudad, somos fundadores de la Liga. Nos gustaría celebrarlo con la afición, pero hemos tenido que hacer un acto privado", comentó el consejero delegado.
Los jugadores, que han acudido después del entrenamiento, esperan este lunes confirmar también que son los campeonatos de la Segunda Divión, el siguiente objetivo del curso. Al respecto, el padre Fermín ha comentado que "vosotros marcáis los goles, pero seguro que la virgen os ayuda. Esto es una manera de beatificar vuestro trabajo". En las imágenes que ha facilitado la entidad se ha podido ver, por ejemplo, a Raúl de Tomás, quien después de superar la COVID-19 y quedarse fuera de la lista el martes podría reaparecer ante el Tenerife el lunes.