El nuevo jefe es Guillermo Fernández Romo
El míster del Cornellá en las dos últimas temporadas llega al Racing como entrenador con poderes para confeccionar la plantilla. Estuvo en el club en 2018
El Racing ha elegido a Guillermo Fernández Romo para ser el nuevo entrenador plenipotenciario del club. Amortizada la figura del director deportivo, será el técnico madrileño el máximo responsable tanto de fichar como de entrenador a la plantilla de la próxima temporada. A favor de Romo, conocido en la casa porque estuvo apenas un mes en el verano de 2018 dirigiendo la cantera verdiblanca por encargo de Chuti Molina, ha jugado no solo su buen desempeño en la categoría al frente de equipos como Cornellá, Ejea o Jumilla como su buena relación con Víctor Alonso, director general y hombre de confianza de Alfredo Pérez y Pedro Ortiz. La noticia la delantó esta mañana la Cadena SER en Cantabria.
Romo es un madrileño de 42 años que desde muy joven se decantó por los banquillos, sin asentarse demasiado tiempo en ningún sitio. Antes de las dos exitosas campañas que ha pasado en Cornellá, la primera se quedó a un partido del ascenso y este año se ha asegurado la 1ªRFEF, entrenó al Ejea, al Jumilla, al Sabadell y al Olímpic de Xátiva, todos en Segunda B. En la temporada 2010/11 dirigió al Noja, al que hizo campeón de la Tercera cántabra, y en las dos campañas anteriores fue el técnico del Celta de la División de Honor de Juveniles. En la primera de ellas quedó primero, invicto, en la División de Honor y llegó hasta la final de la Copa de campeones, que perdió ante el Barcelona por 2-0. En aquel equipo dirigía a jugadores como el defensa Hugo Mallo, el delantero internacional Rodrigo Moreno o el jugador del Alavés Jota Peleteiro.
Además de su experiencia como primer entrenador, el nuevo mánager del Racing ha trabajado formando parte de la dirección deportiva del Jumilla, el Alcoyano y el Murcia (donde coincidió con Víctor Alonso), y fue segundo entrenador de Óscar Cano en el Melilla, el Betis B y el Alcoyano. Tanto en el Betis como en el Racing formó parte del cuadro dirigente de sus secciones inferiores, aunque su paso por La Albericia fue tan breve, apenas un mes, que no puede ni tenerse en consideración.
Con Romo en el banquillo, el Cornellá se ha desempeñado fundamentalmente con un 4-4-2 en sus partidos como local, en un campo diminuto y de hierba artificial, aunque ha variado más de sistema cuando ha visitado estadios más grandes y ha jugado en varias ocasiones con tres centrocampistas, 4-3-3 o 4-2-3-1. Si hay algo claro en toda esta historia es que las condiciones y las dimensiones de El Sardinero no se parecen en nada al Nou Estadi de Cornellá. Tal vez el tipo de jugadores que se necesitan en uno y otro proyecto tampoco sean los mismos, como prueba está el caso de Nana, imprescindible para Romo en la temporada en la que casi ascienden a Segunda, mientras que apenas ha contado en el Racing ni para Rozada ni para Solabarrieta.
Los resultados de Romo esta pasada campaña han sido más discretos que en la anterior, con la excepción de la Copa del Rey, en la que su equipo eliminó al Atlético de Madrid y solo cayó ante el Barcelona en la prórroga. En la liga regular acabó quinto y no pudo acompañar al Nàstic, al Barça B y al Andorra en la lucha por el playoff. En la segunda fase, eso sí, su equipo reaccionó y se ha clasificado primero y asegura su presencia la próxima temporada en Primera División RFEF, probablemente en el Grupo Norte, en el que coincidirá con el Racing.
