De "niño mimado" a estrella del equipo
Mason Mount, quien no tenía la confianza total de la afición, ha sido nombrado mejor jugador de la temporada. El más joven en serlo desde John Terry.
Ha nacido una estrella. Stamford Bridge tiene un nuevo ídolo y su nombre es Mason Mount (22). El canterano blue está siendo una de las grandes sensaciones de Inglaterra, vital en el equipo de Tuchel que se ha metido en la final de la Champions y que ha retomado el rumbo en liga tras un comienzo complicado. Su talento, entrega y demostración partido a partido de que siente el Chelsea como el mayor aficionado, han hecho que los seguidores blues le elijan como mejor jugador de la temporada 20-21. El más joven en serlo desde un tal John Terry en 2001. Buen espejo en el que mirarse.
El "niño mimado" de Frank Lampard
Pero no hace tanto, este mismo comienzo de temporada, la afición blue no las tenía todas consigo respecto al jugador nacido en Portsmouth. Desde que llegó al Chelsea con seis años, fue uno de los jugadores más destacados de la academia, empezando a labrarse el título de “joven promesa” en el verano de 2017 cuando fue campeón y MVP de la Eurocopa sub 19 en 2017. Ese verano fue cedido al Vitesse holandés donde acumuló titularidades a pesar de tener su corta edad. El Chelsea vio la oportunidad de traerlo más cerca de casa al año siguiente cediéndolo al Derby County al que recién había llegado Frank Lampard en su primera experiencia como entrenador en el fútbol profesional.
La sinergia que tuvieron canterano y leyenda fue tal que cuando Lampard dio el salto al Chelsea, animado también por la sanción que no permitía fichar al equipo, no dudo en llevarse consigo a su pupilo. Fue ahí donde comenzó a labrarse el mote de “niño mimado” de Lampard. En su primera temporada en la élite Mount fue titular indiscutible como interior pero a pesar de sus siete goles y seis asistencias en Premier, su inconsistencia y malos partidos en Europa, provocaron que muchos aficionados no entendiesen por qué era tan importante para Frankie. De hecho, el canterano que mejor sensación dio de todos a los que Lampard dio una oportunidad fue el lateral Reece James.
Con la gran inversión realizada en verano en fichajes como Ziyech, Havertz y Werner, todo apuntaba a que Mount perdería su lugar en el once, pero nada más lejos de la realidad. Lo que empezó para muchos como una confianza ciega en el canterano y un desprecio a grandes inversiones como Havertz, ha terminado con Mason Mount como mejor jugador de una temporada en la que pueden terminar como campeones de Europa.
Tanto Lampard, usándolo de interior, como Tuchel, colocándolo de mediapunta, han dado a Mount un rol de indiscutible que se ha labrado en el campo. El canterano era el mejor partido tras partido cuando las cosas no iban bien y ha sido la estrella en las grandes noches de Champions y de Premier League. El pasado febrero se convirtió en el segundo jugador más joven de la historia del Chelsea en alcanzar los 10 goles en liga, solo por detrás de Arjen Robben. En Champions es el más joven en marcar para el Chelsea en una eliminatoria, además de tan solo ser superado en precocidad por Wayne Rooney como inglés más pequeño en anotar en unas semifinales. Ya nadie se acuerda de “el niño mimado” de Lampard que en dos temporadas se ha convertido en la estrella del ilusionante proyecto de Stamford Bridge.
Con un ojo en la Eurocopa
El otro gran beneficiado de esta explosión es sin duda la Selección de Inglaterra. Gareth Southgate le hizo debutar el siete de septiembre de 2019 ante Bulgaria, pero en las convocatorias de comienzo de año tuvo un papel secundario. De hecho, en la nueva camada de mediapuntas con la que cuenta los Three Lions, Jack Grealish, James Maddison y él, Mount era en el que menos esperanzas se tenía para esta Eurocopa.
Pero al igual que en su club, la situación cambió con el paso de los meses. Ha sido titular en los últimos siete partidos oficiales tanto en los correspondientes a la UEFA Nations League como los últimos tres de clasificación para el Mundial jugados en marzo. Apunta a ser clave para Southgate este verano y quien sabe si viendo su progresión esta Eurocopa se revaloriza aún más. El inglés empezó la temporada con un valor de 45 millones en Transfermarkt y ya va por los 60.
La nueva estrella blue tendrá el reconocimiento que merece y recibirá el trofeo antes del saque inicial del partido de hoy en Stamford Birdge ante el Leicester, encuentro que supone la vuelta de los fans al Bridge por primera vez desde diciembre. En el horizonte ya asoman la final de la Champions y la Eurocopa, dos títulos con los que el nuevo ídolo del Chelsea quiere inaugurar su estantería de trofeos. No sería un mal comienzo.