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BARCELONA 1-CELTA 2

Aprobados y suspensos del Barcelona: este Messi necesita un nuevo proyecto y nuevos socios

El delantero argentino intentó tirar del carro, sacando orgullo, pero sus compañeros no le acompañaron, tirando las últimas opciones que tenían en LaLiga.

Ter Stegen: El portero alemán está acabando la temporada con muchos altibajos y sin ofrecer seguridad bajo los palos. El gol de Santo Mina es buena prueba de ello, es imperdonable que te metan un gol desde esa distancia y aún más que hagas la estatua. Luego sacó dos buenas manos, a un remate de Denis Suárez y Solari. En el segundo gol, volvió a quedarse en tierra de nadie, con la fortuna de que el balón fue al palo, pero luego aprovechó Santi Mina para certificar el triunfo.

Araújo: Uno de los pocos que se salva. El central urguayo es un compendio de fuerza, potencia, ambición y liderazgo. Tuvo una gran ocasión de cabeza, solo ante el portero, tras un rebote de Piqué, pero envió incomprensiblemente el balón fuera.

Piqué: Mal. Lleva varios partidos a un nivel bajísimo. Está claro que la rodilla derecha y la edad le están castigando más de la cuenta. El gol de Santi Mina es culpa suya en parte, al no atacar al jugador y además tapar el balón a Ter Stegen. Fue sustituido en el minuto 63.

Lenglet: Muy irregular. Fue expulsado por doble amarilla en el minuto 83. Dio soluciones a la salida de balón, pero su juego en defensa es muy deficitario, con muchas lagunas.

Dembélé: Empezó como una exhalación como carrilero por la banda derecha, con un Aarón desbordado ante el vendaval de juego del francés. Sin embargo, poco a poco, Ousmane fue perdiendo fuelle y acabó siendo intrascendente.

Sergio Busquets: Otro que se salva de la mala imagen general del equipo. Si bien no fue su mejor partido, sirvió una enorme asistencia a Messi e intentó mantener el equilibrio en el mediocampo. Sin embargo, cometió algunos errores no forzados que dieron cierta inseguridad al equipo.

Ilaix: Partido digno del chaval. No se le puede pedir más. Es ambicioso, fuerte y osado, pero le falta un poco más de continuidad en el juego y de juego combinativo. Intentó ver puerta en dos ocasiones, una con un remate muy lejano y otra con un remate de cabeza muy desviado.

Pedri: Sólo jugó la primera parte. Un cambio curioso porque estaba aportando soluciones en el juego entre líneas. Pero Koeman decidió dejarlo en la grada y dar entrada a Riqui Puig.

Alba: El lateral izquierdo realizó su habitual catálogo de pases dentro del área que fueron desaprovechados sistemáticamente por sus compañeros, sobre todo uno de Braithwaite a bocajarro.

Messi: El argentino no puede hacerlo todo solo. Lo intentó hasta el último minuto, al menos no acabar el último partido en el Camp Nou con una derrota, pero algunos de sus compañeros no estuvieron a la altura. Marcó un gol de cabeza, pero no fue suficiente ni para empatar. Hasta en cuatro ocasiones lo intentó, con escasa fortuna. Pese a todo, es uno de los pocos que puede irse con la cabeza bien alta esta temporada. Laporta tendrá que hacer un esfuerzo para traerle nuevos socios que le hagan creer en un nuevo proyecto. Con los que tiene ahora, no dan para más.

Griezmann: El francés completa los partidos de manera tan funcionarial que hasta da un poco de repelús. No se le puede echar nada en cara, pero no aporta ningún plus. Y eso para un jugador que cobra 45 millones brutos es un insulto. Su camino está claramente marcado, bien lejos del Camp Nou.

CAMBIOS:

Riqui Puig: El de Matadepera entró con muchas ganas e intentó muchas cosas, algunas le salieron y otras no tanto. Sufrió el llamado efecto champán, tras la explosión del espumoso, se quedó sin gas.

Dest: Se puso las pilas en la banda derecha, aportando profundidad en el juego y dinamismo en la fase de arriba, pero no fue suficiente.

Braithwaite: Fallar un gol como lo falló, solo ante la portería, es un claro síntoma que el danés no puede seguir ni un día más en el Barcelona. Es carne de traspaso.

Trincao: El portugués, aparte de un slalom tan interesante como alocado, no aportó mucho al juego. Reclama una cesión urgente, ahora mismo no tiene nivel para estar aquí.

Pjanic: Suponemos que salió para despedirse del Camp Nou. Tuvo suerte que no había gente en la grada porque le hubieran dedicado una buena pitada.