Espanyol 2021-22: los primeros fichajes llegan con el ascenso
Se ejecutan las compras de Dimata, Miguelón y Vadillo, así como sensibles aumentos salariales de jugadores clave, y se retomará la renovación de Puado.
Así como cada 1 de enero a la medianoche entran en vigor nuevas medidas en cualquier país, el ascenso matemático del Espanyol comporta automáticamente novedades en forma incluso de fichajes para la próxima temporada. Vuelve el equipo blanquiazul a la Primera División solo un año después de haberla abandonado y, a grandes trazos, estas son las primeras directrices de la plantilla que luchará, por lo pronto, por mantener una categoría que nunca debió perder.
Varias opciones de compra obligatorias se han ejecutado en el instante exacto del ascenso. Concretamente, las de Nany Landry Dimata, Miguelón Llambrich y Álvaro Vadillo, quienes militaban en el RCDE Stadium en calidad de cedidos y pasan desde el 1 de julio a ser propiedad del Espanyol. Asimismo, unos cuantos futbolistas clave con quienes se pactó una rebaja salarial durante la temporada en Segunda volverán no solo a percibir sus emolumentos anteriores, sino que –si se cumple el trato– percibirán también lo que perdonaron.
El ascenso también es el momento estipulado por los agentes de Javi Puado para poder iniciar las conversaciones sobre su futuro, habida cuenta de que el Espanyol le trasladó una oferta de renovación hace alrededor de tres meses para atar su continuidad, ya que acaba contrato en 2022. Quien ya renovó es Diego López, en su caso no por subir sino por haber superado los 30 partidos oficiales jugados.
Con todo, se le presenta al área deportiva comandada por Francisco Joaquín Pérez Rufete, y al Espanyol al completo, un mercado marcado por la contención, salvo que se produzca una enorme venta que agite la plantilla y las posibilidades económicas de una entidad que buscará futbolistas que acaben contrato, o cedidos, para partir del reto de entrada más realista: la permanencia.