VALENCIA 3 - REAL VALLADOLID 0
Sergio González: "Dependemos de nosotros mismos"
El técnico del Real Valladolid mantiene la creencia en las opciones de permanencia pese a la dura derrota de Mestalla.
El Real Valladolid cosechó una nueva derrota con las manidas buenas sensaciones, que le hace llegar a los nueve partidos sin ganar. Sergio González reconoció en la posterior rueda de prensa que están "hasta las narices" de dar esa imagen y no ganar. Sin embargo, el entrenador insistió en que los blanquivioletas dependen de sí mismos y en que, aunque "el calendario es difícil", mantienen opciones de permanencia.
¿Por qué el equipo no aprovechó la primera mitad?
Creo que empezamos con un buen planteamiento de partido y que los futbolistas han estado muy bien. Creo que por fases hemos minimizado al Valencia y hemos sido mejores que ellos, pero la lástima es la gestión del partido; en ese último minuto no podemos darle una oportunidad al Valencia y más teniendo el balón nosotros. No hemos estado estables otra vez en ese aspecto y no hemos gestionado bien los momentos sin balón. El equipo demostró capacidad y potencial, se asoció bien y llegó bien al área contraria, aunque en el último tercio le faltó un poco de colmillo. El gol no tiene que pasar, porque en estos momentos hay que estar más templado, estable y tener mejor de partido. Quedaba un minuto y no podía pasar nada; teníamos que haber sacado arriba, estar todos juntos y pendientes de la segunda jugada y que se fuera el partido al descanso con ese empate a cero. Fue el único error de la primera parte, que encima nos costó un gol.
En el descanso, a pesar de hablar y recuperarnos, hemos salido pensando aún en esa acción, y nos ha perjudicado, porque prácticamente en tres minutos han metido el segundo y a partir de ahí el partido ha sido otro. Hemos intentado por todos los medios acercarnos en el marcador, pero no ha podido ser; aunque hemos estado cerca, el partido estaba más en otra órbita, en lo que quería el Valencia para generarnos peligro en esas transiciones.
¿Cómo se encuentran después de cosechar este resultado?
Estoy triste y fastidiado, porque hemos desaprovechado una oportunidad, pero no podemos estar todo el rato fustigándonos, tenemos que coger lo bueno, recuperarnos y gestionar los momentos del 'otro fútbol'. Este año nos están penalizando los finales del primer tiempo, los principios del segundo, finales del partido... Tenemos que ir hacia adelante, dependemos de nosotros y estamos fuera del descenso. El calendario puede ser difícil, está claro, pero tenemos que sacar fortaleza, creer y estar convencidos. Hay que limpiarse y seguir.
¿Cree que la derrota les hará daño, después de las sensaciones del principio y la derrota?
No tenemos que pensar en eso; tenemos que resetear, empezar de cero y entender que el partido ya ha pasado, que ya no lo podemos volver a jugar y esos puntos ya no podemos ganarlos, pero sí los de Villarreal. Creo que tenemos que focalizarnos, dónde nos pueden hacer daño y dónde se lo podemos hacer nosotros. Eso es en lo que nos tenemos que desgastar, porque este partido ya no nos va a sumar ni a restar. Es verdad que llevamos mucho tiempo sin esa sonrisa y esa sensación de la victoria, y aunque en muchos partidos hemos estado muy cerca, estamos hasta las narices de las sensaciones: lo que queremos son puntos. Tenemos que hacer más piña, apretarnos todavía más y entender que el jueves tenemos otra batalla, que dependemos de nosotros y por qué no vamos a poder ganarla.
¿Cómo de importante ve el apartado psicológico en el final?
Está claro que, a nivel físico, lo que tienes, ya lo tienes, y a nivel táctico puedes trabajar los cuatro matices que requiera cada partido. La cabeza va a ser vital para todo, porque capacidad el equipo demuestra que tiene, pero en esa capacidad de gestionar las emociones, el momento de no tener la pelota o el momento de entender en qué momento estamos del partido, estamos en déficit, de ahí que estemos donde estamos. El empaque va a ser importante, y sobre todo, la lectura de partido. El que menos tenga errores no forzados va a ser el que se acabe salvando, y ojalá seamos nosotros. Nos vamos jodidos, pero dependemos de nosotros y tenemos que seguir creyendo.