Jorgensen: "Sueño con ser el número 1 del Villarreal"
El tercer portero del Villarreal, atado hasta 2025, se ve "preparado para dar el salto".


El Villarreal tiene dos porteros de gran presente y, sobre todo, uno de gran futuro: Filip Jorgensen. El meta nórdico trabaja a diario con Asenjo y Rulli y juega habitualmente con el filial amarillo. Jorgensen es la gran apuesta del Villarreal para que se convierta en el primer gran portero surgido de la cantera que se afianza en el primer equipo. Por ello, lo tienen blindado con un contrato hasta 2025.
El club amarillo aún no ha decidido qué pasará con él la temporada que viene. Aunque él se ve preparado para dar el salto definitivo al primer equipo. "Confío en mis posibilidades. Este año he aprendido de los mejores cada día. Estoy preparado para dar el salto", asegura a AS. El hecho que el Villarreal apostará por él con un contrato largo es algo que valora: "El club siempre ha confiado en mí desde el primer día. Sólo pienso en entrenar y mejorar". Eso sí, tiene claro su sueño: "Ser el número 1 del Villarreal algún día". "Por eso renové con un contrato tan largo. Queda mucho trabajo y tengo que aprender y mejorar mucho", añade.
Jorgensen está haciendo una gran temporada en el Villarreal B aunque sabe que tiene cosas por mejorar. "Es muy difícil ponerme una nota nota a mí mismo. hay un montón de cosas para mejorar siempre. Estoy en una etapa de aprendizaje, tanto de compañeros como de entrenadores. Pero confío mucho en mí", asegura.
Noticias relacionadas
Además, Jorgensen tiene que tomar una decisión importante en los próximos meses. Es internacional sueco en todas las categorías inferiores. Aunque la Federación danesa le ha tentado para que cambie de selección de cara a la absoluta. "Aún no he decidido. Mi padre es danés y mi madre sueca, tengo doble pasaporte, puedo ir con los dos", apunta.
El portero amarillo quiere ser el número 1 del primer equipo más adelante aunque en su pasado empezó de delantero. "De pequeño era delantero, siempre me ha gustado marcar goles. pero un día en Malmoe, con 10 años, llegamos al entrenamiento y nos dijeron que nuestro portero se había roto el brazo. Me puse yo y desde aquel día siempre he sido portero", terminó.





