Saúl sigue con hambre
El centrocampista ha completado los tres últimos partidos y su rendimiento crece. La baja de Lemar abre un hueco y él, en un año difícil, necesita una buena recta final.
La goleada ante el Eibar fue una bocanada de oxígeno para el Atlético y, para algunos de sus futbolistas, una importante dosis de moral. En la plantilla hay jugadores como Saúl que necesitan más buenas noticias así para acercarse a su mejor versión. El ilicitano ha completado los tres últimos encuentros (Sevilla, Betis y Eibar) y en el de este domingo por fin se vio a un Saúl a la altura de lo esperado, con balón y sin él y a pesar de que se movió por varias posiciones.
Saúl dio 50 pases buenos de 54 (92,6%), entre ellos la asistencia del 3-0 (la primera de la temporada), un envío genial en largo hacia Carrasco para dejarle solo ante el portero. El 8 empezó en la banda derecha del 4-4-2, hasta que Simeone, que vio que el equipo estaba muy espeso, agitó a algo más parecido a un 4-3-3 y Saúl se colocó como interior izquierdo, al lado de Herrera. En el tramo final, con la sucesión de cambios, tuvo ratos de segundo delantero. La polivalencia sigue siendo un punto a su favor.
Con todo, está siendo una temporada muy complicada para Saúl. La competencia en el centro del campo es altísima, porque Koke es indiscutible, Lemar ha despuntado desde hace meses y Llorente es uno de los futbolistas más determinantes de la Liga. Y ahora está Héctor Herrera, que ha reconquistado a Simeone con sus dos últimas actuaciones. Ahora, las molestias de Lemar y el avance de Llorente al ataque abren opciones en la medular.
El presente y el futuro, en el aire
Saúl ha marcado dos goles y ha dado uno en los 34 partidos que ha jugado. Con este último tramo, ha pasado a ser el noveno futbolista del Atlético con más minutos (2.263), pero lejos aún de su participación en anteriores temporadas, en las que estaba siempre entre los tres más utilizados. Él mismo ha reconocido en más de una ocasión que no estaba en un buen momento, aunque en algún que otro encuentro se han podido ver brotes verdes, como ante el Eibar.
El presente es incierto, pues Saúl promete pelea, pero la competencia en el once está carísima. Y el futuro también. A más corto plazo, el tren de la Eurocopa parece ya muy lejano. Y a continuación, y después de 330 partidos de rojiblanco (más los que le puedan quedar por delante), el mediocentro podría cambiar de aires este verano si se dan las circunstancias. Ya hay clubes, como el Bayern, que han tanteado al jugador. Pero eso no toca aún. Ahora hay siete partidos decisivos y Saúl quiere sumar desde donde le pida el Cholo, como ha hecho siempre.