Makaridze hace esperar al Espanyol
Sadiq regresa para adelantar a los de Gomes. Raúl de Tomás asiste a Dimata en el empate y erra desde los once metros un gol que significaba un ascenso
No remató el ascenso, pero se quedó cerca el Espanyol después de su empate en el Estadio de los Juegos Mediterráneos, que acogió un espectáculo de muchos quilates, con opciones en ambas porterías y con Makaridze como héroe local después de detener el lanzamiento de penalti de Raúl de Tomás. El madrileño demostró que es un jugador de superior categoría, asistiendo a Dimata y fabricando ocasiones con una facilidad pasmosa. Empero su fallo desde los once metros resalta aún más esa fina línea entre el éxito y el fracaso. La clasificación, eso sí, convierte el punto perico en tres al no permitirle al Almería recortar distancia, por lo que el ascenso será cuestión de semanas, fiesta a la que se deberían unir los de Gomes si mantienen la versión recuperada hoy.
A veces la realidad está alejada de las altas expectativas previas. No fue el caso del duelo de esta noche entre las dos plantillas con el límite salarial más alto de la categoría, eso sí, echándose en falta por momentos se echó en falta más vida en ambas áreas. Tanto José Gomes, cuestionado en las últimas semanas, como Vicente Moreno dieron continuidad a sus onces, con las únicas novedades en el once local de Morlanes y Aketxe, mientras que en el Espanyol entraron Óscar Gil y Calero. Los blanquiazules, hoy de amarillo, fueron fieles a su fútbol, proponiendo sacar el balón jugado desde atrás, alejados de ese estilo conservador de la mayoría de visitantes del Mediterráneo. El Almería, el equipo con mayor posesión de la categoría, sufre cuando no tiene el esférico, pero hoy mejoró sus prestaciones defensivas, uno de los objetivos prepartido visto lo visto en las últimas fechas.
Ambos equipos igualaron prácticamente en todas las facetas durante un equilibrado primer acto, alternándose el dominio constantemente. El Espanyol movió el balón de lado a lado buscando un descosido en el entramado defensivo rojiblanco, no llegando éste hasta el tanto de Dimata. El Almería, por su parte, lo intentaba con transiciones más rápidas que de costumbre, percutiendo salir por el carril derecho con Balliu, de capital importancia junto a Akieme. A los cinco minutos el ex del Barcelona protagonizó una gran acción individual que finalizó con un pase atrás sin estar acertado Aketxe -muy activo hoy- en la finalización. A punto estuvo de responder el Espanyol, si bien Balliu estuvo providencial al corte cuando Raúl de Tomás esperaba un balón franco para rematar.
En el 32' la tuvo Akieme en un peligroso testarazo tras centro de Balliu, acción que resumió la propuesta indálica, recuperando ese juego exterior tan interesante en las tardes de gloria de este curso. Dos minutos antes otra incorporación por la banda derecha acabó con un peligroso pase atrás de Balliu que no encontró rematador. Fue en la segunda mitad, cerca de la hora golfa, cuando el intercambio de golpes fue mayor. En el 49' Gomes recuperó a Sadiq para la causa, desaparecido días anteriores y muy alejado del área rival en la primera parte. En una jugada iniciada desde atrás Robertone filtró uno de esos pases que se les pide a los jugadores que deben ser diferenciales, colándose Sadiq entre Óscar Gil y Calero, ganándole la partida al boecillano y cruzándola con la zurda al palo izquierdo de Diego López. El nigeriano se catapulta hasta las 16 dianas en liga, igualando el registro de Darwin Núñez.
La alegría duró poco en el banco local. Ocho minutos después Darder rompió todas las líneas del mundo con un magistral pase a Raúl de Tomás, quien se marchó de Buñuel (llevaba cuatro minutos en el verde por molestias de Balliu) con una facilidad pasmosa, cual niño disfruta de una piruleta. El '9' apuró línea de fondo y le regaló medio gol a Dimata que remachó con la testa. La igualada fue un jarro de agua fría para los de Gomes, que no se despertaron hasta el penalti parado por Makaridze. El Espanyol había reclamado tres penas máximas previamente: una entrada de Maras a Raúl de Tomás, una mano de Morlanes y un supuesto empujón del último a Dimata. A la cuarta fue la vencida, aprovechando el veterano delantero la inexperiencia y el nombre de Buñuel, dejándose caer ante una carga del de Tafalla. Makaridze hizo justicia al adivinar la trayectoria del lanzamiento del propio de Tomás, en su tercer penalti errado de manera consecutiva.
Los rojiblancos intentaron reaccionar, pero de manera tímida. Un disparo de Lazo se envenenó tras un rebote, pero el Espanyol quería sentenciar el ascenso e hizo borrón y cuenta nueva de la pena máxima fallada. Gomes reaccionó danto entrada a Villar para jugar con dos puntas y a Ramazani y Brian Rodríguez para aprovechar su velocidad y desborde. Vicente Moreno también refrescaba a los suyos, poniendo en liza a Wu Lei, dando prueba las modificaciones la calidad de ambas plantillas. El Espanyol puso el campo cuesta abajo, dueño del esférico, pero sin terminar de romper el buen hacer defensivo de la UDA.
Fue en una falta lateral donde estaba el premio, con un remate espléndido de Raúl de Tomás, pero Makaridze se puso el traje de superhéroe gatuno y desbarató el triunfo visitante, probando suerte dos minutos después Embarba con un peligroso centro chut. El empate le permite al Espanyol mantener la distancia de diez unidades con el Almería, tercero, distancia que le debería bastar con apenas siete partidos por disputar. Mallorca, que a pesar de su pinchazo del sábado está a siete unidades del Almería, que tiene perdida la diferencia de goles particular con ambos. El ascenso directo parece cada vez más claro...