Ante el Espanyol, más que tres puntos
El Almería sólo ha sacado un punto de 18 posibles ante los cinco primeros clasificados, buscando ante los pericos un triunfo que haga volver a creer.
A siete puntos del ascenso directo, lo más lejos que ha estado desde que llegase el jeque, y once por encima de la séptima plaza, el encuentro del próximo lunes (21:00) ante el Espanyol no es una cita sin red, si bien los de José Gomes se juegan más que tres puntos: ganarle por fin a uno de los primeros clasificados, romper la mala racha, volver a creer en el ascenso y asegurar el puesto del técnico portugués.
En concreto, la UDA apenas ha sacado un punto de 18 posibles ante los cinco primeros clasificados, unos de los debes de Gomes. Incluso, el dato no es nada halagüeño en una futura promoción, dando prueba de la dificultad del joven vestuario en las citas importantes. El Mallorca venció al cuadro almeriense tanto en la ida (0-1) como en la vuelta (2-0), mientras que el Leganés venció en su feudo (2-1) e igualó en el descuento con esa famosa pena máxima (1-1).
El Sporting y el Espanyol sólo se han enfrentado una vez al conjunto de José Gomes, venciendo los asturianos en el Estadio de los Juegos Mediterráneos (0-1) y los de Vicente Moreno como locales (1-0). Ahora, a falta de lo que suceda en El Molinón, en la última fecha, la UDA tiene una nueva oportunidad. Un triunfo el próximo lunes también significaría poner fin a la mala racha después de dos derrotas consecutivas y cinco puntos de los últimos 18, una cantidad irrisoria para un equipo que aspira a lo máximo y que en condiciones normales se hubiese jugado ante los pericos una posición de ascenso directo.
Todo ello con el futuro de José Gomes sobre los aires. Después de los vaivenes en el banquillo la pasada temporada, Mohamed El Assy y Joao Gonçalves son partidarios de la continuidad del entrenador, pero una tercera derrota consecutiva podría desembocar en una drástica decisión procedente de Arabia Saudí, donde la impaciencia es mayor. Eso sí, imponerse al actual líder calmarían las aguas, con el chute de moral de cara a la promoción.