Bebé complica a un flojo Almería
El portugués le da la victoria al Rayo Vallecano, mejor durante todo el encuentro, en un contraataque. Ivanildo se marcha expulsado en el 69'.
Hay noches en los que el fútbol sí entiende de merecimientos. Y si el Rayo pescó los tres puntos del Estadio de los Juegos Mediterráneos, plaza que históricamente se le da bien, no fue por culpa del VAR, sino por tapar los puntos fuertes del Almería y tener paciencia en un partido que maduró. Bebé fue letal saliendo desde el banquillo para consolidar a su equipo en la promoción, zona con la que se van a tener que conformar los de Gomes a no ser que encuentren alternativas en su juego y que el Espanyol y el Mallorca den varios patinazos.
Iraola agitó su once en busca de un Rayo con mejores prestaciones que las ofrecidas frente al Sporting. El preparador usurbildarra realizó hasta cinco modificaciones, todas por decisión técnica, excepto la de Álvaro, que sustituyó a Trejo, entre algodones. Al de Utretra le acompañaron Dimitrivski, Santi Comesaña, Isi y Antoñín. Gomes, que meses atrás revolucionaba su once en el término más estricto del término, apenas introdujo a Corpas, en detrimento de Brian Rodríguez, y Fernando, por el sancionado Makaridze. Todo ello a pesar de haber transcurrido apenas 72 horas respecto al duelo de La Rosaleda.
Los madrileños salieron más enchufados en una primera mitad trabada. No en vano, los de Iraola reclamaron dos penaltis y el Almería otro. El Rayo supo cómo hacerle el daño al cuadro indálico, presionando arriba la salida de balón local, con una intensidad encomiable. Y los almerienses no se sintieron incómodos pese a que el estilo de juego del rival a priori le viene mejor que aquellos con bloque bajo que se encierran en el Mediterráneo. Sin embargo, entre que a los de Gomes erraban en la transición ataque-defensa y que la velocidad del Rayo no tenía nada que envidiar a los aviones que despegaban a pocos kilómetros desde el aeropuerto de El Alquián hizo que los segundos fuesen ganadores a los puntos.
Eso sí, las ocasiones claras durante el primer acto se contaron con los dedos de una mano. En el 39' avisó Fran García desde la línea de tres cuartos, teniéndola Álvaro en el rechace. Instantes después Isi intentó aprovechar la inercia de los visitantes probando a Fernando. Respondió entonces Lazo con otro disparo lejano. El paso de los minutos no hizo mella en el Rayo, que continuó mordiendo arriba, con el Almería fiel a su librillo, varios amagos de infartos entre sus seguidores incluidos por esa norma de no dar un pelotazo en la salida de balón.
Fran García, joven de 21 años y hechuras de veterano, probó con un nuevo obús antes del triple cambio de Gomes, que no dio ningún resultado a pesar de que los suyos pedían a gritos modificaciones. Si el Almería se acercó a la portería de Dimitrievski fue más por fuerza que por argumentos porque a la hora de la verdad el macedonio tuvo una noche plácida. Un centro desde la izquierda que rebotó en Saveljich y se envenenó y un cabezazo de Akieme en un envío desde la derecha fueron algunas de las pocas ocasiones indálicas.
El partido se le puso más cuesta arriba aún al cuadro almeriense con la expulsión de Ivanildo, que deja pocas dudas en la acción y muchas en el futuro rojiblanco. Era el 69' y un salto aéreo con Isi supuso su segunda amarilla y que el punto, malo, pudiese ser considerado hasta regular. Entonces aparecieron las figuras de Álvaro y de Bebé, éste saliendo desde el banco. El '18' tuvo una doble oportunidad, superando primero a Balliu y marchándose su disparo por poco, y después en un desmarque de ruptura, plantándose ante Fernando y blocando bien el murciano.
La UDA la tuvo en un robo de Carvalho, quien asistió a Sadiq, durmiéndose éste en los laureles cuando mejor la tenía con su habitual recorte antes de disparar. También en un libre directo del propio Carvalho, antes de que emergiese Bebé. En el minuto 88 se cumplió la máxima de que el objetivo número uno en un saque de esquina a favor debe ser no encajar. Tras un córner local Bebé empezó a correr cual galgo, encarando primero a Balliu y después a Morlanes y tras apoyarse en Álvaro, la mandó al palo derecho de Fernando tras rebotar en la espalda de Balliu. El Almería sigue a cuatro unidades del Espanyol y Mallorca, si bien pueden ser siete en caso de que baleares y catalanes no pinchen el domingo. El bajón de juego de los de Gomes tiene su consecuencia en un pírrico punto de los últimos nueve en casa, cinco de quince en el campeonato. La dinámica es contraria en el Rayo, ganando cuatro de sus últimos cinco compromisos.